El Fondo Verde para el Clima aprobó este viernes el RECLIMA, un proyecto de 127,7 millones de dólares diseñado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), con el objetivo de mejorar la resiliencia frente al cambio climático de los sistemas agrícolas en el Corredor Seco de El Salvador.
De acuerdo con un comunicado de prensa de la FAO, la iniciativa beneficiará a 225 mil personas, de las cuales 20 mil pertenecen a comunidades indígenas; y cerca del 38 % de los hogares beneficiarios están encabezados por mujeres.
La decisión, adoptada por la Junta del Fondo Verde para el Clima (GCF, siglas en inglés de Green Climate Fund) en su reunión en Manama, Bahréin, supone que el GCF destinará al proyecto unos 35,8 millones de dólares EEUU. RECLIMA recibirá también 91,8 millones de dólares del Gobierno de El Salvador y del Fondo de la Iniciativa para las Américas (FIAES).
RECLIMA involucrará a 50 mil agricultores familiares en 114 municipios, casi el 15 % de todos los campesinos familiares en el país. El proyecto trabajará con un tercio de la población más vulnerable al cambio climático en el Corredor Seco de El Salvador, un área que sufre de sequías severas, inundaciones y tormentas tropicales.
“Se trata de un proyecto decisivo para adaptar el país a los efectos del cambio climático. La propuesta apunta a una nueva forma de practicar la agricultura en El Salvador”, aseguró Lina Pohl, Ministra salvadoreña de Medio Ambiente y Recursos Naturales.
“Al centrarse en los pequeños campesinos, que a menudo son los que están en la primera línea de los impactos climáticos, este proyecto no solo ayudará a crear resiliencia, sino que también crea eficiencias que permitirán a comunidades enteras avanzar en un entorno de cambio climático”, señaló por su parte Maria Helena Semedo, Directora General Adjunta de la FAO para Clima y Recursos Naturales.
Transformar los sistemas alimentarios
RECLIMA promoverá un cambio profundo en los sistemas alimentarios del Corredor Seco de El Salvador para ayudar a erradicar el hambre, la pobreza y abordar los desafíos del cambio climático. Aquí se incluye la intención de reducir y/o capturar más de 4 millones de toneladas de carbono durante un período de cinco años.
El proyecto trabajará con los agricultores familiares para transformar sus prácticas productivas, mejorando su infraestructura básica y conocimientos técnicos con el objetivo de lograr sistemas alimentarios plenamente sostenibles y resilientes.
En particular, el proyecto busca aumentar la resiliencia en los sistemas productivos agrícolas que abarcan más de 56 000 hectáreas, promoviendo la adopción de medidas de adaptación, como el uso de semillas tolerantes a la sequía.
RECLIMA pretende también mejorar los sistemas de extensión agrícola, promoviendo un enfoque del paisaje para restaurar los servicios ecosistémicos, mediante la recuperación de 17 mil hectáreas de ecosistemas degradados. Además, cerca de 4 mil familias se beneficiarán de un mejor acceso al agua a través de la captura, almacenamiento y distribución de agua de lluvia.
Con su foco en el Corredor Seco, el proyecto reducirá una de las principales causas de migración internacional originada en las áreas rurales de El Salvador: shocks climáticos como sequías e inundaciones. Como tal, RECLIMA será un elemento clave en la estrategia del país de reducción de la migración por necesidad.
El Salvador es extremadamente vulnerable al cambio climático
El Salvador es uno de los países más vulnerables a los riesgos climáticos en el mundo. Según el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), el aumento de las temperaturas puede reducir los rendimientos de los principales cultivos del país en un 20 % para 2050, debido sobre todo a la sequía.
En el área del Corredor Seco de El Salvador, 2,2 millones de personas viven en una situación de pobreza y vulnerabilidad climática, y el 54 % de ellas depende de la producción de cereales básicos como principal medio de subsistencia.
El proyecto RECLIMA ha sido formulado por los Ministerios salvadoreños de Medio Ambiente y Recursos Naturales; Agricultura y Ganadería y Relaciones Exteriores, junto al Centro Nacional de Tecnología Agropecuaria y Forestal «Enrique Álvarez Córdova» y con el apoyo de la FAO.
Su elaboración ha incluido procesos de consulta inclusiva con la participación de pueblos indígenas, la sociedad civil y el sector privado. RECLIMA contará un Comité Directivo de Alto Nivel que informará sus resultados directamente al Gabinete de Sustentabilidad y Vulnerabilidad Ambiental de El Salvador.
La FAO apoya a los agricultores vulnerables frente al impacto del cambio climático
Tras el proyecto PROEZA en Paraguay, RECLIMA es la segunda iniciativa que la FAO apoya a nivel mundial para recibir financiación del GCF, el principal fondo mundial para financiar actuaciones destinadas a combatir el cambio climático.
La FAO está liderando la formulación de diversos otros proyectos a gran escala para el GCF, en todos los continentes, que serán presentados a la Secretaría del GCF durante los próximos meses.