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Con más de un 55 % de las intenciones de voto, el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros, candidato del Frente Amplio de la Patria, cuenta con el mayoritario apoyo popular para su reelección en los comicios que el próximo 20 de mayo tendrán lugar en el país sudamericano.
La preferencia electoral por Maduro, mostrada por encuestas de la empresa consultora International Consulting Services, lo distancia de su principal rival y más cercano competidor por la presidencia, Henri Falcón, del Partido Avanzada Progresista, con un 25,4 % de probabilidades de lograr la victoria.
En vísperas de estas elecciones se mantiene el masivo respaldo del pueblo a Maduro y a la forma en que ha conducido la respuesta a la guerra económica y los llamados a la abstención o la violencia, promovidos por los partidos de oposición derechista y la oligarquía proimperialista, furibundos adversarios de la continuidad del Gobierno bolivariano y promotores del retorno al pasado de expoliación, miserias y dependencia política y económica prevalecientes antes de la llegada al poder del histórico Comandante Hugo Chávez Frías.
Maduro ha exhortado a los venezolanos a votar en los comicios del 20 de mayo para neutralizar los objetivos de estas “mafias criminales” que, en su criterio, buscan reforzar su dominio sobre la economía venezolana.
El mayor enemigo de Venezuela, e instigador de los planes subversivos que llevan a cabo las fuerzas opositoras en contra del Estado bolivariano, es el Gobierno de Estados Unidos, que la considera “un peligro para su seguridad nacional” y utiliza amenazas, sanciones políticas y económicas, calumnias y presiones de toda índole para subvertir el orden constitucional y derrocar a Maduro.
Washington ha realizado una difamatoria y tergiversadora guerra sicológica en los medios de prensa capitalistas para impedir las elecciones y que, con toda transparencia, el pueblo venezolano escoja a sus líderes y defienda las conquistas logradas por la Revolución Bolivariana en los casi 20 años que se ha mantenido en el poder, 15 de ellos lidereados por Hugo Chávez y, desde el 2007, bajo la conducción del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).
El presidente Maduro ha dicho en múltiples ocasiones que su Gobierno opta por la paz, la concordia y la estabilidad, y ha reiterado su disposición a dirimir todas las divergencias en la mesa de negociaciones, aunque la oposición derechista no acepta tal propuesta.
En recientes declaraciones aseguró que si gana las elecciones, convocará inmediatamente un gran diálogo nacional por la paz en la República Dominicana donde invitará a todas las fuerzas políticas del país.
Esta nueva contienda comicial será otra prueba de fuego para el modelo democrático que defiende la República Bolivariana de Venezuela, donde prima el sufragio libre y secreto. Allí el voto ciudadano tiene la última palabra.
