Por Fabio M. Quintero y Daniel Reyes García estudiantes de Periodismo
Cuba estará presente en todas las divisiones de la lucha greco-romana de los Juegos Centroamericanos y del Caribe Barranquilla 2018, luego de que sus seis luchadores arrasaron en la primera jornada competitiva del clasificatorio de la disciplina, celebrado del 22 al 24 de marzo en el Coliseo de la Ciudad Deportiva de La Habana, Cuba.
Encabezados por el campeón mundial y olímpico Ismael Borrero, los grequistas del patio se mostraron en óptima forma pues hasta la instancia semifinal avanzaron sin permitir puntos y solventando la mayoría de los combates por superioridad técnica sobre sus rivales.
Grata impresión causaron para aficionados y especialistas los noveles Ariel Fiss (77 kg) y Gabriel Rosillo ( 97 kg), que al decir del profesor Raúl Trujillo, son figuras en ascenso con buenas perspectivas; mientras los más experimentados Luis Orta (60 kg) y Daniel Gregorich (87 kg) se mostraron en muy buena forma para cumplir los objetivos propuestos.
Precisamente, este último comentó: “Este torneo, de conjunto con el panamericano del deporte, nos sirve de preparación para la cita regional de Barranquilla, en la cual esperamos ganar todas las divisiones”.
Por otra parte, todas las miradas del escaso público en el coliseo capitalino se enfocaron en Óscar Pino (130 kg), bronce mundial del 2017, quien por momentos hace recordar por su imponente físico y facilidad con que derrota a los rivales, al espectacular Mijaín López, tricampeón olímpico y cinco veces titular mundial, presente en el recinto como un espectador más.
De los rivales que se vieron en este clasificatorio, los luchadores colombianos se mostraron como los más peligrosos y a tener en cuenta en la lucha por las medallas, debido a la buena preparación exhibida durante el torneo aunque al decir de sus entrenadores: “Todavía nos falta para alcanzar a la escuadra cubana”.