Es un gran privilegio sentirnos lejos de una bala por desempeñar nuestro trabajo. Esa realidad la vivimos los periodistas cubanos desde el triunfo de la Revolución.
Los jóvenes profesionales de la prensa son imprescindibles en el escenario actual de la sociedad cubana para trabajar en el mejoramiento del país, a partir de una prensa veraz, analítica; apreciar lo que no va bien, lo que puede ir mejor.
Así expresó el reportero de prensa Abdiel Bermúdez al intervenir en un panel de periodistas que intercambió sobre derechos humanos víspera del Día Mundial de celebración o lucha de esas conquistas.
El acto, que tuvo por sede el Capitolio Nacional y fue presidido por la diputada Ana María Mari Machado, vicepresidenta de la Asamblea Nacional del Poder Popular, devino homenaje de recordación al ecuatoriano Carlos Bastidas, joven periodista asesinado en Cuba a manos de un esbirro de la tiranía de Fulgencio Batista el 13 de mayo de 1958.
Otros ponentes en el encuentro fueron los colegas Marta Rojas, Eduardo Yasels y Tubal Páez. Ellos rememoraron los muchos crímenes cometidos por Batista, ese tirano que gobernó con total impunidad, hasta el punto de que nunca fue llevado a un tribunal de justicia.
Rojas recordó que por estos días de diciembre de 1956, después del desembarco del yate Granma, fueron más de 20 los jóvenes combatientes asesinados. Tubal repasó que todos los códigos de ética de periodistas plantean que el profesional de la prensa debe decir y escribir la verdad. Entonces evocó al maestro Ernesto Vera cuando señaló que paradójicamente los reporteros son quizás los únicos profesionales a los que pueden matar por decir la verdad.
Añadió que cuando Bastidas fue asesinado ya estaba aprobada la Declaración Universal de los Derechos Humanos, pero el crimen quedó impune.
El joven revolucionario había regresado de la Sierra Maestra, donde tuvo oportunidad de entrevistar al Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, y de hablarle al pueblo cubano por las ondas de Radio Rebelde.
Yasels relató los sucesos vividos en el Santiago convulso de los años 50; su amistad con Frank y otros combatientes del Movimiento 26 de Julio, muchos de los cuales entregaron sus vidas en acciones o fueron masacrados por la tiranía en la Ciudad Heroica.
Sobre la situación de los periodistas y comunicadores en América Latina recibimos mediante un material audiovisual desde Santiago de Chile la información del colega Ernesto Carmona, presidente de la Comisión Investigadora de Atentados a Periodistas de la Federación Latinoamericana de Periodistas, CIAP-FELAP, quien reportó que de enero a noviembre último se registraron 38 colegas asesinados o desaparecidos, algunos de ellos mujeres.
Ante las muchas injusticias que presenta el mundo hoy día, este 10 de diciembre, Día Mundial de los Derechos Humanos, será una jornada de lucha más que de celebración. Los cubanos y cubanas, a sabiendas de que vivimos en una sociedad perfectible, celebraremos los muchos derechos esenciales ganados con perseverancia y afán de justicia.