El avileño Arcides Pérez Jiménez pasó momentos muy difíciles, porque no encontraba apoyo a su empeño. Él quería hacer algo útil a la sociedad y las puertas se cerraban en su propio rostro, sobre todo por incomprensiones. No obstante, la persistencia fue más fuerte que los escollos. Y un día pudo materializar su propósito de hacer pintura, bloques, baldosas…, edificar y reparar viviendas subsidiadas por el Estado y darles empleo a personas que han tropezado en la vida y cumplieron sentencias de privación de libertad o que tienen alguna incapacidad mental.
El fruto de tanta perseverancia y los resultados lo llevaron a estar en las sesiones de la Primera Conferencia del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Construcción (SNTC) y contar su historia en el encuentro de los delegados e invitados de las entidades subordinadas al Poder Popular y vinculadas al quehacer constructivo con directivos de los ministerios del ramo y de Economía y Planificación, entre otros, y también en la sesión plenaria final.
Relató que su labor como trabajador no estatal y la de las personas contratadas ha estado en los últimos tiempos dirigida fundamentalmente a reparar tanques de agua en consultorios médicos, escuelas, hogares de ancianos y de niños sin amparo familiar, viviendas…, y contribuir así al ahorro, al enfrentamiento a la sequía que durante casi todo el año afectó notablemente al territorio avileño y a la campaña antivectorial contra el mosquito Aedes Aegypti.
Consultado por Trabajadores, explicó que han restaurado 5 mil 110 tanques y les colocaron tapas a 2 mil 132. El costo total ascendió a 36 mil pesos, pero el ahorro real, debido a la no adquisición de depósitos nuevos, fue de 357 mil.
“Y no nos detendremos, porque todavía queda mucho por hacer”, afirmó momentos antes de que quienes estaban en el encuentro sindical aplaudieran fuertemente, como muestra de reconocimiento a una obra más social que económica y sustentada en sentimientos puros y genuinos.
Acerca del autor
Graduado de Profesor de Educación General en el Instituto Superior Pedagógico Félix Varela, de Villa Clara, Cuba (1979). Ha laborado en la Revista Juventud Técnica, semanario En Guardia, órgano del Ejército Central, periódicos Escambray, CINCO de Septiembre y Granma. Desde el año 2007 es corresponsal de Trabajadores en la provincia de Cienfuegos. Está especializado en temas económicos y agropecuarios. En 1999 acompañó en funciones periodísticas a la segunda Brigada Médica Cubana que llegó a Honduras después del paso del huracán Mitch. Publicó el libro Verdades sin puerto (Editorial cubana MECENAS). Ha estado en otras tres ocasiones en esa nación centroamericana, en funciones periodísticas, impartiendo conferencias a estudiantes universitarios, asesorando medios de comunicación e impartiendo cursos-talleres sobre actualización periodística a periodistas y comunicadores. Multipremiado en premios y concursos internacionales, nacionales y provinciales de Periodismo. Fue merecedor del Premio Provincial Periodístico Manuel Hurtado del Valle (Cienfuegos) por la Obra de la Vida – 2012. Le fue conferido el Sello de Laureado, otorgado por el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Cultura (SNTC). Mantiene evaluación profesional de Excepcional.