Lázaro Barredo Medina
San Petersburgo.– La senadora mexicana Gabriela Cuevas Barron resultó electa presidenta de la Unión Interparlamentaria para los próximos tres años durante la 137 Asamblea que tuvo lugar en esta ciudad, convirtiéndose en la segunda mujer en ocupar esa alta responsabilidad en la historia de dicha organización creada en 1889, la más longeva del planeta.
Cuevas Barron recibió un fuerte apoyo de la mayoría de los asistentes a esta reunión, que ha contado con el récord de una participación de cerca de 2 mil 400 senadores y diputados agrupados en más de 150 delegaciones nacionales, tras competir con otra latinoamericana, la senadora Ivonne Passada, de Uruguay.
La primera mujer que recibió la encomienda de conducir los destinos de esta organización mundial parlamentaria fue la diputada de la India Najma Heptulla, en el mandato 1999-2002.
Emocionada, la joven parlamentaria de la hermana nación azteca expresó su agradecimiento y el sentimiento de sentirse honrada de trabajar por el mejoramiento de la labor de la institución, y acrecentar la cooperación con los parlamentos nacionales y con el sistema de Naciones Unidas. “Esperamos trabajar como un equipo con todos”, dijo, mientras agradeció al presidente saliente, Saber Chaudhury, de Bangladesh, por el aporte que ha hecho en los últimos tres años al lograr la consolidación del trabajo de la UIP, al igual que a la senadora uruguaya Ivonne Passada, para quien tuvo palabras de reconocimiento.
La 137 Asamblea de la UIP concluyó sus labores luego de cuatro días de profundos debates sobre una veintena de asuntos de máxima actualidad política mundial, y su última jornada se caracterizó por la intensidad, pues además de las elecciones, se debatió sobre varios temas organizativos como el crecimiento de la membresía, la propuesta del presupuesto para cubrir las actividades fundamentales en los próximos años, cubrir las vacantes de cargos directivos en la distintas comisiones y comités, el reporte sobre los acuerdos del Comité Ejecutivo, así como las ideas para la implementación de la estrategia de trabajo de la organización para el período 2017-2021.
Particular decisión fue también la elección del parlamentario ruso Konstantin Kosachev como vicepresidente primero de la UIP.
El plenario conoció asimismo los informes de los distintos comités y foros parlamentarios, y de las reuniones principales de los grupos políticos por regiones, pero el que concitó un extenso debate fue el del Comité de Derechos humanos de los Parlamentarios que presentó valoraciones sobre la situación en 11 países miembros, aunque la mayor concentración de la discusión estuvo dirigida a Venezuela e Israel.
Más de 15 delegaciones opinaron de manera contrapuesta sobre el capítulo venezolano, con predominio de la tendencia que defiende a ultranza a la Asamblea Nacional que ha intentado gestar el golpe de Estado contra el Gobierno bolivariano con el apoyo de Estados Unidos, la Unión Europea y algunas naciones latinoamericanas, en tanto trata de desacreditar las elecciones, la constitucionalidad de la Asamblea Nacional Constituyente, y reproduce los elementos de la manipulación mediática que trata de presentar a Venezuela como un Estado “fallido”.
No obstante, el representante del PSUV, seguido por las delegaciones de Cuba, Nicaragua y Bolivia, criticaron la parcialidad del informe que solo reproduce la versión de una de las partes, con muchos elementos inciertos y sobredimensionados, mientras desconoce la peligrosidad del momento actual cuando Estados Unidos quiere valerse de estos pretextos que validan la injerencia para llevar adelante su proclamada amenaza de la opción militar, poniendo en riesgo a la región latinoamericana y caribeña, y su proclamación como zona de paz. Igualmente, lamentaron que por falta de coordinación y comunicación no se hubiese podido realizar en estos años la visita solicitada por el Comité para conversar con cada una de las partes en Venezuela, lo que hubiese facilitado la elaboración de un informe objetivo y veraz.
Muy confrontativa fue la discusión sobre la presentación de las graves violaciones de Israel contra parlamentarios palestinos, especialmente a partir de dos intervenciones de los legisladores israelíes que los tildaron de asesinos, y tuvieron palabras muy agresivas contra otros países árabes. Varias delegaciones criticaron enérgicamente el discurso pérfido que pretendía convertir a las víctimas en victimarios, mientras que la delegación de Pakistán calificó de doble rasero el informe del Comité de Derechos Humanos de los Parlamentarios al comparar los términos de sus conclusiones sobre el grueso de los países analizados, y la manera tan suave y evasiva con que lo hizo sobre Israel, cuyos representantes tuvieron que retirarse del salón abucheados por la mayoría de los participantes.
La comunidad parlamentaria mundial adoptó la resolución del punto de urgencia aprobado sobre la situación humanitaria de la minoría rohingya en el estado de Rakhine del Norte de Myanmar, pidiendo al Gobierno y al parlamento de Myanmar que se termine de inmediato la violencia y el desplazamiento forzado de los rohingya y las flagrantes violaciones de sus derechos humanos. La resolución recomienda encarecidamente la creación de zonas de seguridad temporales dentro de Myanmar bajo la supervisión de la ONU para proteger a todos los civiles, independientemente de su religión y etnia.
La otra declaración emitida por los parlamentarios de 155 países que asistieron a la 137 Asamblea fue sobre la promoción del pluralismo cultural y la paz a través del diálogo interreligioso e interétnico, en la que se insistió en la necesidad de potenciar la transparencia, rendición de cuentas y respeto bajo el imperio de la ley para servir de base en la real construcción de una diversidad sostenible y pacífica. Por ello, acordaron acciones destinadas a prevenir la discriminación y las violaciones a los derechos humanos relacionadas con la religión y el origen étnico, promover el diálogo nacional y local para crear sociedades multiculturales e inclusivas, mejorar la educación cívica y fortalecer la gestión de los parlamentos.
Después del intercambio de opiniones, la presidenta de las sesiones de esta 137 Asamblea, la rusa Valentina Matvienko, subrayó que es necesario impulsar la discusión a nivel global sobre este tema complejo y diverso, y sugirió proponer la realización de una conferencia mundial que promueva el diálogo interreligioso e intercivilizador con la participación de jefes de Estado y líderes de las religiones mundiales.
De igual modo, la reunión de la UIP adoptó una resolución sobre la diversidad en el vigésimo aniversario de la Declaración Universal sobre la Democracia, en la cual reafirma los elementos centrales establecidos en la declaración original, que incluyen una verdadera asociación entre hombres y mujeres en la conducción de los asuntos de la sociedad, un poder judicial independiente, elecciones libres y justas, medios abiertos y libres, supervisión parlamentaria y la protección de los derechos de las minorías y los grupos vulnerables o marginados.
La próxima reunión de esta institución parlamentaria tendrá lugar en Ginebra, en marzo, con una agenda de temas muy complejos, como la situación migratoria mundial y la necesidad de un ordenamiento legal y seguro que impida las graves consecuencias que por ello están padeciendo millones de personas.