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Organizados a través de la red social Facebook, miles de vecinos de la ciudad alemana de Hamburgo salieron este domingo a la calle para limpiar los barrios después de tres días de manifestaciones en rechazo a la Cumbre del Grupo de los Veinte (G-20), celebrada el 7 y 8 de julio en esa urbe norteña.
Activistas de diversas organizaciones y movimientos protagonizaron desde el jueves y hasta la madrugada de ayer alrededor de 30 marchas, la mayoría pacíficas, para mostrar su inconformidad con un grupo que representa a los países más desarrollados del mundo, entre ellos, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón, Rusia, Alemania, Canadá, y Reino Unido.
Una de las protestas de mayor repercusión tuvo lugar el sábado, jornada en la que concluyó la cita oficial, bajo el lema Solidaridad sin fronteras en vez de G-20, la cual reunió a más de 50 mil personas que reclamaron el fin de la pobreza, las guerras y las causas de la migración masiva.
Familias enteras y grupos de amigos de todas las edades, acudieron a la convocatoria organizada por el partido alemán La Izquierda y agrupaciones sindicales y ecologistas.
A diferencia de las barricadas y actos violentos adjudicados al nombre de Bienvenidos al infierno, y efectuados por grupos radicales de diversos países europeos, esa marcha pacífica también sirvió para exigir la salida del presidente brasileño Michel Temer y denunciar las medidas neoliberales que se aplican en la Argentina de Mauricio Macri.
La mayor de las concentraciones se realizó en el centro de la ciudad considerada la meca del universo antisistema, mientras que otras dos reunieron entre mil y mil 500 personas en los alrededores.
“Da gusto ver esta protesta colorida. Mucha gente habla con nosotros, quiere entender qué hacemos acá y nos expresa su respaldo”, señaló el agente de policía Karsten Schröder, de una unidad dedicada a mediar y evitar escaladas de violencia. “Pero también hay un grupo muy diferente, vestido de negro y que nos ve con malos ojos y nos trata mal”, aclaró.
Los disturbios ocurridos dejaron un saldo de 500 agentes heridos y 186 detenidos, la gran mayoría de forma temporal y después liberados, según el último balance de la fuerza de seguridad alemana.
La canciller de la nación sede del encuentro, Angela Merkel, y el alcalde gobernador de la ciudad, Olaf Scholz, condenaron los actos de violencia, al tiempo que anunciaron indemnizaciones para los ciudadanos afectados.
El acuerdo final de la Cumbre del G-20 respaldó el libre comercio, condenó el proteccionismo y propuso el Plan de Acción de Hamburgo, un programa conjunto que debería impulsar el crecimiento internacional. La presidencia rotativa del Grupo pasará a Argentina en el 2018, luego a Japón en el 2019 y a Arabia Saudita en el 2020. | Con información de El País y Página 12
