Cargando...Lluvia y sequía cohabitan en el territorio nacional. La pluviosidad puntual con que se ha presentado junio casi no deja pasar de las esperanzas, pues muy poco incide en los volúmenes represados.
Al menos en las precipitaciones sobresale Mayabeque, única provincia con resultados por encima de la media mensual, 267.7 milímetros (mm), para el 105 % de ese promedio; en tanto Guantánamo tiene el peor registro, al computar solo el 18 por ciento, según el parte elaborado este domingo por especialistas de la Dirección de Uso Racional del Agua, del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INRH).
Los territorios del oeste conservan la racha de mejor situación respecto a las lluvias, que siguen siendo esquivas en centro y oriente, donde solo ha caído el 36 y el 35 por ciento, respectivamente, de la media para junio.
La propia fuente precisa que los 242 embalses que administra ese organismo almacenan el 37,6 % de la capacidad total, contra el 37 con que cerró mayo. Desde entonces, hasta el cómputo de ayer en la mañana, solo incrementaron en algo sus volúmenes las presas de Pinar del Río, Artemisa, La Habana y Matanzas.
Abasto de agua en la capital
Esta semana debe volver a la normalidad el servicio de agua en la capital, con la conexión de la quinta línea de tuberías en Cuenca Sur, declaró a Trabajadores el ingeniero Javier Toledo Tápanes, delegado del INRH en la capital.
Por su parte, Leonel Díaz Hernández, director general de Aguas de La Habana, dijo que de los municipios del centro afectados por la avería en dicha conductora, solo Diez de Octubre sigue con el ciclo extendido de entregas, hasta tanto concluya la citada inversión. Mientras, la mayor parte del suministro con destino a esa populosa localidad proviene del sistema El Gato, lo cual sigue implicando reducciones en el abasto para Guanabacoa y La Habana del Este.
El directivo precisó que en las afectaciones del servicio también incide la sequía, y ejemplificó que de la fuente de Vento se está entregando la mitad de lo acostumbrado para la época, debido al decrecimiento de la disponibilidad de agua en el canal de Albear.
