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Antes de la final de la Liga Superior de Baloncesto (LSB), muchos se preguntaban cómo sería una final sin Capitalinos y Ciego de Ávila, animadores frecuentes de esta instancia. La rivalidad histórica de ambos conjuntos ponía siempre “picante” a los duelos por el oro y hacía olvidar los habituales errores y falta de efectividad que acompañan el torneo élite de este deporte desde hace tiempo.
La respuesta no ha podido ser más excelsa por parte de Matanzas y Pinar del Río, los cuales en una final inédita han dado lo mejor de sí, en serie del mejor a ganar cuatro que marcha 3-2 favorable a los vueltabajeros.
Sin justificar el sexto lugar de los Búfalos en la clasificatoria, sería injusto no mencionar que la tropa que había luchado por la corona once temporadas consecutivas antes del desastre de la actual campaña, no contó con el aporte del base organizador y jugador más valioso de la pasada LSB, Yasser Rodríguez, lesionado en una de sus rodillas, y Yoan Luis Haití, firmado por el Club Atlético Olimpia de Uruguay.
Las ausencias también marcaron al plantel habanero, que si bien clasificó a semifinales, tuvo fuera de la nómina a Orestes Torres y Lisván Valdés, dos insertados en el Santa Tecla BC de El Salvador.
Más allá de las lógicas afectaciones a sus representaciones provinciales, los más de veinte basquetbolistas, incluyendo mujeres, que han sido contratados desde el 2015 en conjuntos foráneos, son ejemplos de que a nivel regional Cuba tiene jugadores de élite. Por el contrario, como colectivo aún distamos bastante de Puerto Rico, Dominicana, México y Panamá, los más fuertes de la zona.
Regresando al duelo entre verdes y rojos, ningún partido ha superado los ochenta cartones, ejemplo de “la rebeldía del balón para entrar al aro”, aunque en la clasificatoria, el par de finalistas y Villa Clara, fueron los únicos que superaron el 50% de efectividad en los tiros de dos puntos. También, desde la línea de libres son más los fallos que aciertos.
La lucha por las preseas se reanudará en la sala 19 de Noviembre de Pinar del Río este martes. Una victoria de la Maquinaria Roja, fuerte en el combate bajo el aro, empataría a tres victorias el pareo, dejando para el miércoles el último cotejo ante los más occidentales, que tienen en la defensa su principal arma.
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Estudiante de Periodismo.
