La Conferencia provincial del sindicato de Salud en Villa Clara estableció pautas importantes para el reconocimiento de los profesionales de este sector y ponderar los valores de la medicina cubana como una de las conquistas más importantes de la Revolución.
Voces autorizadas, el primero por uno de los más connotados especialistas del Cardiocentro Ernesto Guevara, el segundo uno de los jóvenes médicos que lucharon contra el ébola en África, expresaron la necesidad de reconocer a los mejores galenos del país y rescatar los valores que caracterizan la ética médica cubana.
Con argumentos contundentes y con el respaldo de los asistentes a ese conclave se propuso la necesidad de instituir una distinción que lleve el nombre de Gloria de la Medicina Nacional a especialistas de la salud con amplia y ejemplar trayectoria.
Con dicha distinción se reconocería la labor de quienes se han entregado a los servicios de salud, a salvar vidas humanas en Cuba y en otros lugares del mundo, aquellos que son ejemplo y paradigmas de la medicina revolucionaria de la Isla, a la vez que serviría como estimulo moral al que pueden aspirar las nuevas generaciones de galenos. Una propuesta justa, que valoriza una profesión, dignifica la entrega, el altruismo y la solidaridad de este sector.
Asimismo se enfatizó en el rescate de los valores de laboriosidad, responsabilidad, honestidad y solidaridad, fundamentalmente en los jóvenes médicos, como elementos distintivos de la profesión.
Se analizó además que otros estímulos deben perfeccionarse cómo la categoría de Colectivo Moral y potenciar los centros de Excelencia, porque en ocasiones los indicadores de salud son muy favorables, pero contradictoriamente existen quejas de la población referentes a la calidad del servicio.
Estos asuntos se entrelazan con otros planteamientos, entre ellos, erradicar la entrega de recetas por complacencia, en eliminar el uso indiscriminado de los medios diagnósticos, la falta de puntualidad en el comienzo de los servicios y la emisión de dietas y certificados médicos sin el debido respaldo.
A la vez los delegados, quienes eligieron a la licenciada Chavelis Villanueva como secretaria general de la organización en el territorio, en sus intervenciones enfatizaron en hacer conciencia en los trabajadores sobre los aspectos económicos y argumentaron que la medicina en Cuba es gratuita, pero cuesta, de ahí que exhortaran a realizar un uso racional del equipamiento, de los métodos de diagnósticos etc., sin dejar de atender a los pacientes con eficiencia y hacerle saber a estos cuánto cuesta cada proceder, incluso una simple consulta.
Una asamblea que apostó por los valores morales de la medicina cubana, con el afán de mantenerla integra y sana de vicios ajenos.