Por Betty Beatón Ruiz y Juanita Perdomo Larezada
Sentimientos entremezclados matizaron el amanecer de santiagueros quienes “respiraron” aliviados al saber que Matthew no dejó grandes afectaciones a la provincia, pero quedaron impactados al conocer de los destrozos causados por el huracán en Guantánamo, fundamentalmente en los municipios de Baracoa, Maisí, Imías y San Antonio.
Del mismo modo, las ganas enormes de ver caer un aguacero torrencial que trajera agua a los deprimidos embalses de Santiago de Cuba solo fueron eso y nada más, ansias que permanecen, pues según reportes de especialistas de recursos hidráulicos en las últimas 24 horas ha llovido el 40,3 % del estimado, y de la media histórica en lo que va de octubre sólo ha caído el 25 %.
En estos momentos los embalses de este suroriental territorio acumulan 279 mil 145 millones de metros cúbicos, lo que representa un 40,5 % de la capacidad total que es de 690 millones de metros cúbicos.
En el costero municipio de Guamá se reportan afectaciones en algunos tramos de la carretera, en particular en las zonas de Babujal, Palma Mocha, La Magdalena y la entrada de Chivirico, el poblado cabecera.
Por lo demás todo está en calma en la provincia. Muchas de las personas protegidas en casa de vecinos y familiares, así como evacuados en centros estatales comienzan a retornar a sus hogares.
Poco a poco la normalidad se abre paso de conjunto con la solidaridad para con los hermanos guantanameros, principalmente con los de los municipios de Baracoa, Imías, San Antonio y Maisí, los puntos más impactados por Matthew durante su paso por Cuba.
Acerca del autor
Periodista cubana. Máster en Ciencias de la Comunicación. Profesora Auxiliar de la Universidad de Oriente. Guionista de radio y televisión.