Una recopilación de la obra del artista plástico Edelson Machado (1963-2015), premio nacional de paisaje 1982, se expone en la Arche Galería de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac), en Villa Clara.
Edelso, quien fue profesor de arte de la Escuela Vocacional Ernesto Guevara y de la Casa de Cultura Juan Marinello de Santa Clara, y uno de los paisajistas más reconocidos del país, sigue vivo a un año de su desaparición física y su huella está en los pinceles que dejó mojados y las masas de color que aún están por terminar en uno de sus lienzos.
La muestra es como toda la obra de Edelso sui géneris, en ella se plasma desde el paisaje más apacible hasta la más recóndita selva, es el mundo de la naturaleza “unas veces deshabitada y salvaje y otras apenas salpicada por la mano del hombre”, al decir del crítico de arte Antonio Pérez, presidente de la Uneac en el territorio.
Muchos le han señalado a su creación puntos de contacto con Tomás Sánchez solo que según refiere el especialista se distingue del resto de sus coetáneos por el peso de lo abstracto y la libertad gestual, aspectos inéditos hasta entonces en el paisaje cubano.
Fue Edelso un artista que representó lo cubano, pero a partir de la maleza, la manigua, el humedal y el lagunazo, donde es rara la palma y lo matérico se convierte en una jungla, en feroz ramazón, en camuflaje y abstracción de troncos, juncos… sigue explicando el crítico villaclareño.
Sus obras están diseminadas por diferentes centros e instituciones de Villa Clara en particular de la salud, educación y el Conjunto Escultórico Comandante Ernesto Guevara.
Un homenaje a este artista quedó sellado con esta exposición Huellas de Edelso, esas que han quedado para siempre en el paisaje que dibujó y que ha dejado desde su visión bohemia y particular del arte , el que esconde una vitalidad y energía peculiar detrás de una aparente serenidad, como también apuntó Antonio Pérez.