El presidente boliviano, Evo Morales, se despidió este sábado del pueblo de Cuba tras dos días de visita oficial, en la cual aseguró sentirse inspirado en la lucha antiimperialista de los hombres y mujeres de la isla.
En el capitalino aeropuerto internacional José Martí, Morales fue despedido por Mercedes López, vicepresidenta del Consejo de Estado cubano y otras autoridades del gobierno.
Durante su estancia en la mayor de las Antillas, Morales recibió la víspera de manos de su homólogo cubano, Raúl Castro, la Orden José Martí, la más alta distinción que otorga el Consejo de Estado del país caribeño.
Al recibir la medalla, el líder del Movimiento Al Socialismo reconoció la ayuda brindada por el Gobierno y pueblo cubanos a otros países y en especial a Bolivia, a pesar de las dificultades causadas por el bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos a la isla desde hace más de medio siglo.
«Cuba, para los movimientos sociales de Bolivia y especialmente para mí siempre ha sido una fuente de inspiración en esta lucha por la liberación de nuestros pueblos. Es ejemplo de unidad, de lucha antiimperialista; Cuba para mí es modelo de país socialista para todas las naciones del mundo», puntualizó.
Previo a su condecoración, Morales sostuvo un encuentro con el presidente, Raúl Castro, con quien revisó el estado actual de las relaciones bilaterales y evaluó las opciones para fortalecer la cooperación entre las dos naciones.
Igualmente, el mandatario boliviano colocó una ofrenda floral al Héroe Nacional de Cuba, José Martí, en la plaza capitalina homónima.
Morales, partió rumbo a su país en compañía del canciller boliviano, David Choquehuanca, del ministro de Defensa, Reymi Ferreira, la ministra de salud, Ariana Campero, y el titular de Educación, Roberto Aguilar, entre otras autoridades.
Tomado de PL