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Con su paciente y callada labor Caridad Velázquez Pupo contribuye a que el boulevard de la ciudad de Holguín mantenga su esplendor y se encuentre entre los sitios predilectos de sus habitantes para disfrutar de un rato de solaz y sano esparcimiento.
Esta trabajadora, que presta servicio en la Dirección Municipal de Servicios Comunales desde hace más de 15 años, tiene la responsabilidad de limpiar diariamente y cuidar de jardines, bancos y lámparas en un tramo del céntrico paseo.
“Yo siempre me levanto bien temprano, precisa, a eso de las tres de la mañana, porque vivo muy lejos, más allá de la entrada al aeropuerto civil, trato siempre de, a más tardar las cinco, estar en el boulevard para dejarlo limpio antes de que se llene de transeúntes.
“Empecé a trabajar en Comunales en el año 2000 para ayudarle a mi hijo más chiquito que estaba en el Servicio Militar, parecía difícil, inapropiado para una mujer, pero pronto me acostumbré y hasta empezó a gustarme.
“Por eso me quedé y aún sigo laborando en Comunales, pues lo hago con amor y cariño, siempre soy la misma con todo el mundo, no me pongo brava con nadie, me parece que este es un trabajo como otro cualquiera, muy necesario y honrado.
“Lo mismo limpio una calle que un parque o cuido un jardín, voy adonde me necesiten, ahora me ubicaron en el boulevard, estoy al tanto de todo hasta la una de la tarde cuando termino mi turno, de mantenerlo limpio, echarles agua a las maticas, resembrarlas o llamarle la atención a una persona, nada de sentarse mucho.
“Es verdad que hacen falta más cestos de basura, pero también que la gente es indisciplinada, no cuida la limpieza y lo mismo bota el cucurucho de maní que la lata de refresco, se sube a los bancos o pone los pies en la pared.
“No a todos se les puede llamar la atención porque hay muchos que se ponen bravo y hasta te ofenden, por eso digo que es necesario también la acción de los inspectores y demás autoridades, encargados de requerirlos o multarlos.
“Nosotros vivimos en una sociedad socialista en la que debemos ayudarnos los unos a los otros, cuidar la ciudad para que luzca más bonita y mantener la higiene, sobre todo ahora, que estamos amenazados por varias epidemias.
“En cuanto a los instrumentos de trabajo tenemos problemas, muchos carritos para la recogida están en mal estado y hay compañeros que ni siquiera tienen uno, las escobas son muy malas, al igual que los guantes y no duran nada”.
Mas ninguna de estas dificultades detiene a Caridad, quien celebra con orgullo el Día Internacional de la Mujer porque recientemente fue galardonada con un reconocimiento especial como trabajadora destacada de Comunales durante más de 15 años, en el acto por el Día del trabajador del sector.
