La batalla de la presente zafra azucarera en Cuba se gana si cada quien defiende el propósito de no dejar descuidado ni un canuto en surcos, guardarrayas, caminos, carreteras, centros de acopio y vías férreas.
Máxime que les han restado volumen y dulce a las cañas la sequía, la ausencia del frío en la actual etapa invernal y las insuficientes atenciones culturales a las plantaciones en el momento oportuno, en determinadas unidades agrícolas.
Un ejemplo: Las 40.5 toneladas por hectárea (ton/ha) reportadas hoy como rendimiento cañero promedio en Ciego de Ávila, es una cifra inferior a la solicitada por el país, aun cuando la central provincia avileña se ubica en la vanguardia en las producciones de este sector a escala nacional.
Los resultados fueran superiores si hubiesen multiplicado su gestión en los surcos antes de la molienda, los colectivos de las Unidades Básicas de Producción Cooperativa Delia, Ognara y Palma; y las Cooperativas de Producción Agropecuaria Primero de Enero, Mártires de Chambas y José Ascanio Pérez, entre otras con menos de 30 ton/ha.
Otra evidencia: La utilización de más materia prima que la norma técnica establecida para producir una tonelada de azúcar, ratifican la necesidad de no desperdiciar ningún trozo de tallo a lo largo de la cadena productiva en el central Ciro Redondo, el mayor fabricante del dulce grano en el territorio avileño.
A esto se suma, el aumento del contenido de impurezas en las cañas que llegan en camiones al basculador de esa planta moledora, aunque afirman los especialistas que por esta vía directa se logra más frescura de la masa verde a moler.
Ahora el gran reto de los trabajadores de este ingenio radica en la elevación del rendimiento industrial que está por debajo de 9 %, cuyo indicador de oro del proceso fabril históricamente demuestra su despegue allí, a partir del mes de febrero.
A pesar de las asperezas del clima y de problemas subjetivos, el colectivo del Ciro Redondo supera hasta la fecha en más de 500 toneladas el plan de producción de azúcar, cumple las normas técnicas de calidad del producto terminado y logra otros dividendos en materia de eficiencia que lo ubican en el cuarto lugar nacional en la presente contienda.
No obstante, vale enfatizar que del aprovechamiento de cada canuto de caña para reducir pérdidas en la cosecha, no solo depende la victoria de esta actividad determinante para el cumplimiento del plan del centenario central y el crecimiento de la economía de Ciego de Ávila, sino también de las demás provincias cubanas incorporadas a las acciones de la presente temporada azucarera.
Acerca del autor
Licenciado en Comunicación Social. Economista y periodista. Escribe sobre asuntos económicos, agropecuarios, de la construcción y la cultura. Multipremiado en concursos de periodismo, festivales de la radio y otros eventos. Atesora las distinciones Félix Elmuza y Raúl Gomez García, los sellos Laureado y 50 aniversario del periódico Trabajadores, y la Moneda Conmemorativa 60 aniversario de la UPEC.
A juzgar por el clima de este tiempo, de Sancti Spíritus para allá hay que apretar el cinto. Sé que llueve en occidente y muchos centrales parados, pero Ciego tiene que enseñar que es de campeonato y sacar todo el azúcar posible. Esa del periodista, de que canuto a canuto, tienen que hacerla suya camagueyanos, tuneros, granmenses, holguineros, santiagueros y la gente de mi tierra guantanamera. La economía de 2016 lo necesita. La cosa está tensa, pero hay que dar duro pa lante. Cinto fuerte azucareros, confiamos en uds. Saludos desde Portugal.
Canuto a canuto en cada lugar, hacer todo en la cadena productiva, en la preparación de tierras, en la siembra, en las atenciones culturales a la caña, en la aplicación de maduradores, en el corte, en el tiro, en la frescura de la caña y su preparación antes de la molida, en los botaderos de guarapo en el central, en fin en cada uno de los lugares donde se pierde o se pueda perder azúcar, esta es una zafra a prueba de voluntad, contra el clima y el tiempo. En condiciones difíciles es donde mejor se ve la grandeza de los hombres y mujeres, aprovechemos a la oportunidad.
La realidad de la actual zafra azucarera es que esta ha tenido un elemento en contra: el clima, pero los trabajadores azucareros se encuentran enfrascado en dar lo mejor de si para que el país pueda llegar al plan previsto. Es seguro que cada central hoy moliendo aprovecha al maximo cada pedacito de caña para lograr la calidad establecida en el azúcar.