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En el contexto actual, con el desarrollo impetuoso y acelerado de las nuevas tecnologías, la labor política ideológica necesita repensarse, alejarse de esquematismos y rutinas, marchar a la par de los nuevos tiempos con argumentos y convicciones.
Tal fue el llamado del secretario general de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC), Ulises Guilarte de Nacimiento, al intervenir durante la sesión inicial de la Primera Conferencia Nacional del Sindicato de los Trabajadores de la Educación, la Ciencia y el Deporte (SNTECD).
En la comisión que debatió acerca de la educación política de los trabajadores, el también miembro del Comité Central comentó que la estimulación es de las demandas más recurrentes de los afiliados, y subrayó lo imprescindible de emplear los resortes morales y la creatividad que existe en los territorios.
Mencionó lo que significaría resaltar en la escuela, ante todo el colectivo estudiantil, la actitud destacada de un padre obrero de la construcción; cuánto ello reportaría en el orden moral tanto para el hijo como para la familia.
En este sentido, insistió que puede hacerse mucho a nivel de barrio, de comunidad, “esas son de las fortalezas que deben aprovechar los sindicatos”, enfatizó.
Hablar de labor política ideológica —señaló— implica cambiar la manera tradicional de todo lo que hacemos, enaltecer a aquellos que más trabajan, y movilizar las fuerzas en el cumplimiento de determinados objetivos.
En la comisión las intervenciones estuvieron relacionadas con la ejemplaridad de los docentes, la necesidad de incentivar el estudio de la historia patria, retomar la obra Martiana, la educación en valores, el rescate de las tradiciones patrióticas, y elevar la preparación política de los afiliados, con independencia de la labor que realicen en los colectivos.
Otros temas versaron sobre los retos del sindicato en las condiciones actuales, el liderazgo de los dirigentes, el éxodo de los docentes, el completamiento de los claustros, las condiciones de trabajo, y la política salarial.
José Manuel Bermúdez Figueroa, del centro mixto Raúl Galán González, de Jatibonico, Sancti Spíritus, elogió en la sala la presencia de la doctora María Dolores Ortiz, reconocida educadora cubana, paradigma para las presentes y futuras generaciones, y afirmó que “el sindicato de los educadores es grande no por el número de afiliados sino por su obra”.
En relación con la solicitud de aumento salarial, acotó la necesidad de tener cultura económica y poner los pies sobre la tierra. Refirió que a fines de año la Asamblea Nacional del Poder Popular aborda el tema del crecimiento económico, y que solo “podremos comenzar a pedir cuando crezca el PIB”, enfatizó.
Si algo está claro —agregó— es que la Revolución le ha dado al magisterio todo lo que ha podido. Tengamos confianza de que tan pronto se pueda la más alta dirección se acordará de nosotros, dijo en tono coloquial el maestro que ha dedicado cuatro décadas de su vida a formar generaciones de cubanos.
Asistieron también a la sesión de la comisión el Ministro de Educación Superior Rodolfo Alarcón Ortiz; Ermela García Santiago Gisela Vázquez Duarte y Raimundo Navarro, miembros del Secretariado Nacional de la CTC, así como Ernesto Freyre Casañas y Ania Álvarez, jefes de departamentos en la organización obrera.
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El éxodo de docentes, la calidad de los maestros que se forman, la falta de motivación hacia las carreras pedagógicas tienen causas multifactoriales, siempre se aduce al salario y en verdad es necesario, pero mucho se pudiera hacer por las instituciones correspondientes para atender mejor al maestro que forma parte de la población envejecida, que requiere de espejuelos, prótesis dentales , requiere resolver servicios que pudieran priorizarse para los maestros y profesores.
El salario de los maestros y profesores nominalmente es alto en comparación con otros sectores del país, lo que sucede es que los precios excesivamente altos en nombre de la oferta y la demanda disminuyen el poder adquisitivo, hasta ahora el mercado ha campeado por su respeto y los que infantilmente pensaron que con oferta y demanda iban a lograr estimular la producción y bajar los precios, la vida ha dicho lo contrario de lo ya sabido de antemano pues somos un pueblo informado y sabemos que el capitalista prefiere derramar la leche para mantener los precios que bajarlos, de lo que se trata es de que lo que haga la escuela no se derrumbe con la impunidad de los que explotan al pueblo aprovechándose de las necesidades, la sociedad también es una escuela y eso es salario para el maestro, no solo dinero. Se dice que la base debe estimular pero cómo se controla eso por las instancias intermedias y superiores del ministerio, pienso que se ha perdido una oportunidad para hacer un debate colectivo del tema donde realmente participemos con nuestros criterios,el periódico Trabajadores ha hecho un buen esfuerzo para publicar lo acontecido pero no todos los docentes tienen el acceso todavía para participar por esta vía, no podemos cambiar las cosas haciendo lo mismo, bebamos cada día del concepto de REVOLUCIÓN de FIDEL pues sin EDUCACIÓN NO HAY REVOLUCIÖN
Pienso que lo planteado por el cuarentenario profesor Jose Manuel Bermudez no es la posicion que va o pueda resolver los problemas actuales del magisterio cubano ,con consignas y complacencias creo que no .Hay que incidir en las causas y no hacer como el Avestruz ,no podemos llamarnos a engaños el exodo profesoral es de origen multifactorial