Anuncian nuevas ventas de cocinas de inducción y gas licuado

La Nuevas normas jurídicas  para la comercialización y venta liberada de las cocinas de inducción y gas licuado, y la recepción de los cilindros del gas licuado y de petróleos en las empresas de Cupet , que no está incluidos en los registros de esta empresa, han sido publicadas en la Gaceta oficial extraordinaria No. 34 de la República de Cuba.

Diana Argudín Quesada, directora de Pla­nificación, Evaluación y Con­­trol de Petróleo y Gas del Mi­nisterio de Energía y Minas (Minem),  explicó en conferencia de prensa que esta medida forma parte de la Política de Cocción de Alimentos del año 2012, la cual fue actualizada en los años 2013 y 2014,  que incluye la venta liberada de combustibles domésticos y otras tecnologías avanzadas de cocción como alternativa adicional a precios no subsidiados.

Según se conoció, la recepción por las empresas de (Cupet) de los cilindros del gas licuado y de petróleos en poder de la población que no está incluido en los registros de esta empresa, entrará en vigor el próximo día 19 del presente mes.

Lo anterior tendrá lugar en La Habana y las capitales de las provincias de Mayabeque, Artemisa, Matanzas, Camagüey, Isla de la Juventud, Holguín, Santiago de Cuba y en el  municipio de Moa, donde se ejecuta la venta liberada del gas licuado, explicó Riyaguel Capote Rodríguez, director comercial del grupo de Cupet.

Durante tres meses se van a recibir los cilindros y los clientes pagarán solo 200 pesos cubanos, así como el precio normado para la venta liberada para poder incluirse en el registro. A  los clientes que estén  interesados en adquirir el gas licuado por el sistema  se les realizará un proceso de revisión, agregó Capote Rodríguez.

A partir de la publicación de las normas empieza  la venta liberada a la población de las cocinas de inducción y  sus menajes en las provincias de Pinar del Río, Las Tunas, Holguín, Granma, Santiago de Cuba y Guantánamo a un precio de 500 pesos cubanos.

La venta de los productos de cocción, que incluyen una hornilla eléctrica, cazuela, jarro, sartén con tapa y cafetera, pueden ser adquiridos por ventas de crédito y en las tiendas de la red de mercados industriales.

Los consejos de la administración municipales decidirán la cantidad de módulos que se venderán a cada persona. Esto garantizará el acceso a estos productos por la mayor parte de la población y para evitar acaparamientos, explicó en conferencia de prensa Nancy Valdés Jiménez, viceministra del  Comercio Interior.

Agrega, que se seleccionan estas provincias para el inicio de este experimento porque  cuentan con la mayor cantidad de núcleos familiares que cocinan con los módulos eléctricos entregados como parte de la Revolución energética y de la Política de cocción, equipos que ya han cumplido  su vida útil.

“El Plan previsto para fabricación para este año es de 384 mil módulos para el país. Las provincias  pueden comenzar en el momento en que cuentan con el 70 % para la distribución en sus municipios”, explicó la viceministra.

Los productos de cocción son fabricados en Cuba y  en la medida en que se vayan produciendo su venta se extenderá  paulatinamente a otras provincias, de acuerdo a la prioridad de las localidades.

Para mantener la vitalidad de estos equipos  se estimula  la inclusión de técnicas más novedosas que ahorran más energía y que permita a la población reponerlos cuando lo necesite.