«Aquí toda hazaña es posible»

“Gracias Santiago; gracias Fidel, gracias Raúl por sus enseñanzas y su ejemplo, por su espíritu de lucha, por su intransigencia revolucionaria. No les fallaremos jamás porque nada podrá doblegar la voluntad de un pueblo que no sabe rendirse, con el temple de hombres y mujeres que llevan sobre sus hombros la dignidad de vivir en esta tierra indómita”.

Así expresó Lázaro Expósito Canto, miembro del Comité Central y primer secretario del Comité Provincial del Partido en Santiago de Cuba, al intervenir en el acto por el aniversario 62 de los asaltos a los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes, donde expuso los principales resultados económicos y sociales de este territorio.

“Aquí toda hazaña es posible, porque los santiagueros jamás le han fallado al Partido ni a la dirección de la Revolución, porque en Santiago, querido Fidel y Raúl siempre, pero siempre les esperará la victoria”, afirmó el dirigente partidista.

Expósito Canto expresó la satisfacción del pueblo santiaguero por ser la sede de este acto, que coincide con los 500 años de la fundación de la villa de Santiago de Cuba. “Esta decisión constituyó para los santiagueros, un alto honor y un deber, que nos compromete ante el pueblo de Cuba a entregarnos a cada tarea con mayor fervor y espíritu revolucionario.

“Le decimos a Fidel que como mismo escogió la ciudad de Santiago de Cuba aquel 26 de julio de 1953 por su tradición de lucha y por la seguridad de contar con su gente, hoy y siempre puedan contar con este pueblo rebelde y heroico. Con los jóvenes de la generación del centenario, este pueblo martiano y fidelista no defraudará la confianza depositada en él, así lo prueba su respaldo absoluto a la Revolución y al Socialismo, su constancia y capacidad para resistir todas las adversidades, su fortaleza ante las dificultades, lo cual  constituye un desafío a los valores de los santiagueros.

“Su espíritu de resistencia y victoria se puso de manifiesto una vez más ante la recuperación del devastador huracán Sandy, se trabajó y se trabaja intensamente para eliminar sus secuelas sin precedentes en la historia de la provincia”.

Expósito Canto enumeró los esfuerzos en este proceso, para lo cual fue significativo el apoyo incondicional de la dirección de la Revolución, que ni un solo instante dejó de acompañarlos, con la presencia de Raúl Castro, que en los días más difíciles estuvo junto a ellos.

También significó el respaldo de todas las provincias, el grupo económico social del Consejo de Defensa Nacional, la colaboración internación de países amigos, en especial de Venezuela y Ecuador, y la voluntad del pueblo de recuperarse como muestra de los valores sembrados por la Revolución.

El dirigente del Partido expresó el orgullo que sienten por los trabajadores de todos los sectores, estudiantes y cuadros administrativos y políticos, que han sido protagonistas de las principales en función de avanzar en las tareas encomendadas, esencialmente la orientación de Raúl de edificar una ciudad cada vez más bella, higiénica, ordenada y disciplinada.

“Raúl pidió un Santiago florecido, con su belleza natural, que como dijera el trovador, espera en cada julio un nuevo juego de luces; un Santiago trabajador, con la estrella del Moncada, orgullosos de saber que nadie podrá ni nada apagar esta sonrisa eterna de su gente, de lo real maravilloso santiaguero.

El Primer Secretario del Partido en Santiago de Cuba manifestó que los hijos de la cuna de la Revolución han trabajado en varios procesos y programas para llevar adelante el desarrollo económico y social del territorio.

Recordó a los seguidores del legado internacionalista del Che Guevara de los diferentes sectores, entre ellos a los 32 colaboradores de la salud que combatieron al Ébola en África Occidental y otros cientos que cumplen misiones en diversas partes del mundo.

Durante la etapa han laborado intensamente bajo la consigna de:  Con el esfuerzo de todos ¡venceremos!, empeño que ha estado presente en cada jornada; destacó que se trabajó con unidad, lo que quiere decir compartir el combate, los riesgos, los sacrificios, los objetivos, las ideas, conceptos y estrategias para impulsar y consolidar el quehacer económico, social y político de la provincia y “hacer un Santiago como lo soñó Fidel y lo ha pedido el General de Ejército Raúl Castro Ruz.

Afirmó que han llegado a esta conmemoración con resultados alentadores en el cumplimiento de los planes económicos. Sobresalen la zafra azucarera, la mayoría de los renglones agropecuarios; los polos productivos cumplen sus programas de siembra y se empeñan en consolidar los programas especiales de la ganadería, fruto de la aplicación de los Lineamientos de la Política Económica y Social del Partido y la Revolución, aprobados en el VI Congreso.

Se destaca la tasa de mortalidad infantil de 3,7 por cada mil nacidos vivos, inferior al cierre del año anterior que fue de 3,8, un resultado que Expósito calificó de histórico, quien precisó los satisfactorios dividendos del proceso docente educativo.

Precisó que el mayor peso del plan de inversiones se concentra en la vivienda con más de 59 millones de pesos; y se trabaja en varias obras de beneficio social y económico, la erradicación de cuarterías y la rehabilitación de edificios multifamiliares, todo lo cual se ha logrado por el esfuerzo colectivo, añadió.

Lázaro Expósito reconoció que “queda mucho por hacer todavía”, y que la celebración de los aniversario 500 de la fundación de la villa y el 62 de los asaltos a los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes, ha generado un gran espíritu de trabajo, por eso desde aquí les decimos a todos los cubanos ¡confíen en Santiago, desde aquí jamás permitiremos que nadie pueda mancillar esta obra colosal que nos ha costado tanta sangre”.

En sus palabras rindió homenaje a los 61 jóvenes caídos en los sucesos del 26 de Julio de 1953, “ellos entregaron sus vidas por las razones que hoy defendemos; su sangre fue cimiento sobre la cual se edificó la Patria que hoy salvaguardamos. A ellos, el pueblo de Cuba, le rinde perenne homenaje y le dedica las obras  que enaltecen y hacen invencible a la Revolución”.

Y ratificó a todos los cubanos: “¡Confíen en Santiago!