Se hizo la magia en la ciudad de San Juan de los Remedios, ubicada en la provincia de Villa Clara. La celebración del aniversario 500 de su fundación, este 24 de junio, la rejuveneció y preservó.
Urbe de calles irregulares, de construcciones de amplios portales, grandes aleros que protegen a los caminantes de la intensidad del sol.Una rica histórica y cultura la caracterizan, está envuelta en misterios, leyendas y sonidos que vienen desde la propia controversia existente sobre su origen.
La fundación de Remedios se remonta al año 1515 por el conquistador Vasco Porcallo de Figueroa en las inmediaciones del actual poblado de Jinaguayabo, con el nombre de Santa Cruz de la Sabana, muchos años después fue denominado San Juan de los Remedios o el Cayo, en 1545 la villa contaba con ayuntamiento propio, por lo que es conocida internacionalmente como la Octava illa de Cuba.
Remedios se asienta en una zona llana con abundante topografía cársica, con numerosas cavernas que sirvieron de refugio a la población aborigen y escenario para el nacimiento de algunas de sus leyendas, un incalculable caudal de agua subterránea y la presencia de suelos rojizos.
Actualmente es una ciudad dinámica con excelentes edificios, paseos, parques, escuelas y monumentos. Entre los flamboyanes de su parque se extiende la única plaza que en Cuba posee dos Iglesias: Nuestra Señora del Buen Viaje y la Parroquial Mayor de San Juan Bautista, ambas con valores arquitectónicos reconocidos.
La arquitectura colonial, barroca y ecléctica marca el tiempo y los diferentes períodos de la Octava Villa fundada por los españoles en la Isla. Han sido conservadas numerosas edificaciones de los siglos XVIII, XIX y principios del XX que conforman uno de los conjuntos urbanos más valiosos, significativos y coherentes del país.