“Es una fiesta a la que se vino a vivir y crecer con la lectura; a llevar a la praxis la frase de que ‘ser cultos es el único modo de ser libres’”, dijo el destacado escritor Jesús David Curbelo, durante la edición camagüeyana de la Feria del Libro.
Niños, jóvenes… decenas de agramontinos se reunieron, entre el 8 y el 12 de abril, desde temprano, en los predios del Casino Campestre, el parque más extenso de Cuba y epicentro de la Feria, para adquirir algunos de lo casi 600 títulos que inundaron, además, las librerías de la ciudad, varios centros educacionales como la Universidad de Camagüey Ignacio Agramonte Loynaz, y comunidades alejadas.
Esta edición se dedicó a los 25 años de la editorial lugareña Ácana, la cual regaló, por esta ocasión, novedades como Cocinando con amor, un compendio de recetas de la cocina camagüeyana, cubana e internacional de Jaime A. López García; Lamento y perdón y Reto a la soledad, del Héroe de la República Orlando Cardoso Villavicencio, títulos que acapararon la atención del público.