Un milímetro, quizás un poco más, debe haberse hundido la Isla de la Juventud este 27 de marzo con el hit de oro de Jorge Alberto Tartabull en la duodécima entrada frente a Matanzas, válido para dejarlos al campo (7-6) y que su equipo se colocara delante en una de las semifinales de la 54 Serie Nacional de Béisbol: dos triunfos por uno.
Pero la historia es mucho más larga y tensa, pues los pineros habían empatado sensacionalmente en el noveno, cuando su capitán y hombre líder, Michel Enríquez pegó doble al izquierdo y anotó gracias a par de fly de sacrificios de Luis Felipe Rivera y Jorge Luis Barcelán, este último en territorio foul, lo cual propició un buen tiro de Yadiel Hernández, pero no retenido por el receptor Orlando Arencibia.
Otra vez fue este un desafío de muchas tácticas fallidas y de un ímpetu de leyenda para los Piratas de José Luis Rodríguez Pantoja, que abrieron con tres carreras en el inning de apertura y sacaron del box bien temprano al líder de carreras limpias de la temporada regular, Cionel Pérez. En su auxilio, Adrián Sosa, tiró un relevo de cinco capítulos en el que solo toleró dos hits con cuatro ponches.
El repunte de los “cocodrilos” de Víctor Mesa no se hizo esperar y en el segundo episodio pisaron el home cuatro veces para tomar el mando de la pizarra y explotar al abridor Darién Núñez, otra vez víctima del descontrol, a pesar del voto de confianza otorgado para un pleito tan importante.
En lo adelante, el zurdo Javier Vázquez tiró seis largas entradas y espació otras dos carreras más de los visitantes, la última de ellas por jonrón de Luis Yander la O en el séptimo; mientras sus compañeros ripostaron con dos en el llamado inning de la suerte e hicieron estallar de entusiasmo a miles de personas que desafiaron por más de cinco horas (1:30 a 6:30 pm) el sol abrazador de la pequeña Isla de la Juventud.
“Me preparé porque sabía que podía decidirlo y no me desesperé. Es uno de los momentos que nunca olvidaré porque estamos haciendo historia frente a un Matanzas que todos dan como favoritos, pero que tendrán que pelear duro para ganarnos”, dijo emocionado a la emisora de radio local el autor del sensacional imparable.
No es posible olvidar en esta reseña el salvamento de Héctor Mendoza, quien liquidó los últimos cuatro outs del partido sin ponches, pero con efectividad y control. “Siempre que pueda salir para cumplir mi rol y aportar al equipo pediré la bola”, dijo el lanzador supersónico a la propia emisora que transmitió el partido.
Hubo cosas que no se entendieron en el orden táctico durante el partido, como el rol de relevo del matancero Yoanni Yera en el sexto o la rápida aparición de Yadier Hechavarría, a quien solo le dieron un hit y había demostrado en el primer juego un soberbio dominio sobre los Piratas.
Con la subserie favorable a los locales, el estadio Cristóbal Labra volverá a servir de sede al cuarto enfrentamiento este sábado (desde la 1:15pm), en el que puede esperarse otro duelo de zurdos entre Ulfrido García y el propio Yera.
También en esta jornada se reanudará el play off entre Ciego de Ávila y Granma en tierra avileña con un presumible match entre el local Vladimir García y Yudiel Rodríguez por los alazanes granmenses.
Acerca del autor
Máster en Ciencias de la Comunicación. Director del Periódico Trabajadores desde el 1 de julio del 2024. Editor-jefe de la Redacción Deportiva desde 2007. Ha participado en coberturas periodísticas de Juegos Centroamericanos y del Caribe, Juegos Panamericanos, Juegos Olímpicos, Copa Intercontinental de Béisbol, Clásico Mundial de Béisbol, Campeonatos Mundiales de Judo, entre otras. Profesor del Instituto Internacional de Periodismo José Martí, en La Habana, Cuba.
Esta semifinal llegará al 7mo juego (4-3 a favor de Los Piratas)