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Los resultados del control y fiscalización al proceso inversionista, y sus principales dificultades fue el tema de análisis durante la primera sesión de trabajo de la Comisión de Industria, Construcciones y Energía de la Asamblea Nacional del Poder Popular, en el tercer período ordinario de la actual legislatura, en el Palacio de Convenciones de La Habana.
Con vistas a dar cumplimiento a lo acordado por esta comisión en el primer período ordinario, los diputados visitaron 15 inversiones en 13 provincias del país, para controlar el cumplimiento de los cronogramas de ejecución y la calidad de ese proceso.
Las dificultades con la preparación técnica de las obras, unido a la inestabilidad en la fuerza laboral, la falta de recursos y el poco rigor de los inversionistas en cuanto a la calidad en la terminación y el cumplimiento de los contratos, entre otros factores, lastran la marcha de un proceso que define, en buena medida, el desarrollo del país.
Al respecto, el diputado René Mesa Villafaña, ministro de la Construcción, explicó que “la calidad debe estar en todo lo que hagamos y los constructores son los responsables de garantizarla, pero se necesita inversionistas que exijan. El proceso lo componen el constructor, el inversionista, el suministrador y el contratista”.
“Mi casa tiene que ser mi hotel ―reflexionó Rafael López, del municipio de Playa, La Habana―, los constructores no se pueden diferenciar en los que hacen hoteles o viviendas, la preocupación por la calidad debe ser la misma y a los inversionistas hay que prepararlos, inculcarles que ellos deben cuidar el dinero del Estado y velar por la calidad de las obras en las que se invierten cuantiosas sumas”.
Pedro Astraín, de Mayarí, Holguín, opinó que el inversionista tiene que gestionar ese proceso y velar a pie de obra por su ejecución. “Si la preparación técnica se hace sin tomar en cuenta todos los requerimientos, el resultado es una obra que cuesta más de lo que se presupuestó”.
“En las edificaciones, comentó Mesa Villafaña, detectamos problemas organizativos, muchas veces se comienza sin las fuerzas y recursos necesarios o sin el proyecto completo”.
Otro de los asuntos referidos con fuerza por los diputados fue el de los sistemas de pago vigentes en el sector. Refirieron que en este elemento radica una de las causas de la pérdida de los trabajadores del sector y repercute en la calidad.
Héctor Miguel Ávila del Pino, diputado por el municipio capitalino de Arroyo Naranjo, expuso que es necesario revisar este sistema de remuneración, “a veces por ahorrar quilos perdemos millones, porque para preparar a ese obrero empleamos recursos y tiempo, además de que se cometen ilegalidades para suplir los bajos salarios”.
La fluctuación en el sector ha sido desfavorable, puntualizó Mesa Villafaña. “En el 2013 abandonaron el sector estatal alrededor de 7 mil trabajadores, aunque se desarrollan acciones de capacitación de conjunto con el Ministerio de Educación y el grupo de Maestros de la Construcción para formar obreros capacitados”.
Por su parte, Roberto Valdés, asesor de la comisión alertó sobre los problemas en la industria de producción de materiales. “Está descapitalizada y necesita una atención especial para conseguir los niveles productivos que demanda el país”.
El Comandante de la Revolución, Ramiro Valdés y los titulares de los ministerios de Energía y Minas, Industria y Construcción, así como la presidenta del Instituto de Recursos Hidráulicos, estuvieron presentes en la sesión de trabajo.
