La percusión, la industria cultural y la gestión del patrimonio musical son algunos de los temas a los que ha convocado el Centro de Investigación y Desarrollo de la Música Cubana (CIDMUC) y la XVIII Feria Internacional Cubadisco. Musicólogos, antropólogos, promotores y otros especialistas aportarán sus puntos de vista en un evento que anualmente organiza la isla a través del Instituto Cubano de la Música, el Ministerio de Cultura y otras instituciones que de algún modo se vinculan a la enseñanza y la producción de arte y cultura.
En ese contexto académico se abordarán temas como La historia, el desarrollo y la enseñanza de la percusión en el Caribe y Latinoamérica; La percusión en la música ritual, popular tradicional y académica y Los estudios organológicos aplicados a la percusión. Algunos de los ponentes disertarán acerca del rol de las nuevas tecnologías, los medios de comunicación y las redes sociales; y las estrategias nacionales y globales para la gestión y preservación del patrimonio oral e inmaterial relacionado con la música.
La sede será, entre el 19 y el 23 de mayo, la sala Fernando Ortiz del CIDMUC, donde también se realizarán talleres relacionados con las problemáticas actuales de los comunicadores y medios de difusión de la música, publicaciones especializadas y tendencias actuales de la comercialización.
El simposio internacional es parte del programa de la XVIII Feria Internacional Cubadisco 2014 que tendrá lugar del 17 al 25 de mayo del 2014 e incluye conciertos, presentaciones especiales y una expoventa de productos culturales: discos, libros, artesanías y otros.
Cubadisco honrará en su programa a los instrumentos de percusión, desde el tímpani (centro de la presencia percutiva en los organismos sinfónicos), el xilófono, la batería, los timbales o paila y las tumbadoras (congas) hasta las claves, las maracas, los bongoes, los chekerés y otros sonajeros, la marímbula, las campanas, los güiros, la quijada y cuanto instrumento produzca sonidos a partir de su golpeo, rayado o frotamiento. El presidente de honor será el maestro Enrique Lazaga, quien ha hecho del güiro una cátedra y un símbolo de la música cubana en el mundo a lo largo de seis décadas de ejercicio.
Trinidad y Tobago, junto al resto de las culturas del Caribe, también serán protagonistas pues ostentan la condición de invitadas de honor del año.