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“Orden, disciplina y exigencia debe ser la prioridad en el enfrentamiento a las violaciones e ilegalidades en la planificación física”, ratificó Lázara Mercedes López Acea, primera secretaria del Partido Comunista de Cuba en la capital, durante el balance anual de la Dirección Provincial de Planificación Física de La Habana.
La falta de acción, las demoras en el actuar frente a los problemas, las deficiencias en el levantamiento de las transgresiones, unido a la poca estabilidad de los cuadros de dirección municipales y la carencia de un sistemas de trabajo eficaz, influyeron en el cumplimiento de los objetivos de trabajo de la entidad durante el pasado año.
Marlene Ochoa Muriel, directora provincial de Planificación Física, señaló que en los recorridos siempre aparecen nuevas infracciones. “Debemos jugar el papel que nos corresponde ─y en buena medida─ eso dependerá de la restructuración de los sistemas de trabajo”.
“El 2013 ha sido un periodo de grandes transformaciones en el desarrollo de la actividad de la planificación territorial y urbana y en el rescate rol protagónico de nuestra institución en la toma de decisiones por parte de las autoridades políticas y administrativas”, afirmó Ochoa Muriel.
“Nos corresponde hoy la difícil tarea de reordenar la ciudad, trabajando en el rescate de la disciplina urbanística y luchando por exigir que se cumpla lo establecido”, concluyó.
Durante la reunión Marta Hernández Romero, presidenta de la Asamblea Provincial del Poder Popular en La Habana llamó a dejar a un lado la pasividad ante las situaciones. “Debemos denunciar, buscar los mecanismos, hacer cada cual lo que nos corresponda. Los gobiernos municipales tienen que apoyar a sus direcciones de planificación física”, resaltó.
Muchas son las acciones que faltan por implementar para que la Habana se convierta en una ciudad “equilibrada, humana, gobernable, sostenible y prospera y funcional”, tal y como se propone la Dirección Provincial de Planificación Física con su Plan General de Ordenamiento Territorial y Urbano de la capital.
Un sistema de trabajo coherente y eficiente a todos los niveles, así como la labor mancomunada con los gobiernos municipales serán las claves para el éxito.
