Movimiento obrero realiza actividades previas al XX Congreso

A poco más de una semana para que se inicien las sesiones finales del XX Congreso de la Central de Trabajadores de Cuba, el movimiento obrero en Guantánamo realiza variadas actividades en saludo al evento, al 75 aniversario de la fundación de la CTC, y al 161 del natalicio del Héroe nacional cubano José Martí.

Desde principios de año está en marcha una jornada, denominada de máximo esfuerzo en la producción y los servicios, que persigue saludar el XX Congreso con el cumplimiento de los principales planes productivos e indicadores, y los programas que se materializan en el más oriental de los territorios del país.

La provincia de Guantánamo arriba al cónclave con  importantes resultados económicos y sociales, entre los que destacan el sobrecumplimiento del plan estimado de café a acopiar en la cosecha, la calificación de bien dada a los programas de la agricultura urbana y suburbana y los buenos rendimientos que se logran en la actual zafra azucarera.

En el programa inversionista varias son las obras que se terminan en la etapa entre las que están los hoteles Brasil y Plaza, en las ciudades de Guantánamo y Baracoa, respectivamente; una escuela primaria en la comunidad rural de San Emilio en el municipio de Manuel Tames; así como un círculo infantil, un complejo comercial y una pista bailable, todos en la cabecera provincial.

En la actualidad, y desde hace varias jornadas, la Bandera XX Congreso de la CTC que portará la delegación guantanamera recorre centros destacados de la producción y los servicios de la provincia más oriental y montañosa del país.

El movimiento obrero de Guantánamo estará representando en el Congreso (Del 20 al 22 de febrero) por 59 delegados (tres de ellos seleccionados de forma directa) y dos invitados.

Previo a su partida hacia La Habana los delegados del territorio sostendrán encuentros con representantes de los CDR, el Partido y el Gobierno, y visitarán diferentes colectivos laborales.

Encuentros que, sin duda, permitirán una mejor preparación de los delegados, y así poder abordar en el Congreso temas medulares que preocupan y ocupan a la clase trabajadora cubana (estatal o no estatal) en estos definitorios tiempos en que se enrumba la actualización del modelo económico cubano.