Cargando...Por: Vivian Bustamante Molina
Rubicel Cintra Nápoles se siente abandonado e indefenso, luego de haber dedicado más de 25 años a la industria azucarera. En su carta a esta sección narra que varias enfermedades le imposibilitaron continuar en su puesto de trabajo, en el complejo agroindustrial (CAI) América Libre, de Contramaestre, Santiago de Cuba; y en el 2012 fue trasladado a una plaza de custodio en el organopónico de la entidad.
Al cabo de ocho meses lo declararon disponible, y de enero a abril del presente año es remunerado según la ley. Pero dice que desde mayo, el área de recursos humanos del CAI y la Dirección Municipal de Trabajo no se ponen de acuerdo en quién tiene que reubicarlo.
Rubicel siente que hay transgresión de sus derechos laborales, aunque no refiere si en algún momento acudió al sindicato u otras instancias, cuando lo colocaron de custodio y engavetaron el último certificado emitido por la comisión médica, la cuadictaminó que no podía hacer esfuerzo físico ni realizar largas caminatas.
En su explicación amplía que la espera de reubicación se mantenía a principios de noviembre, y entonces decidió escribir la carta a Buzón abierto, en la cual cuestiona tanta dilación para solucionar su caso, porque debe mantener a su familia y carece de dinero a fin de cubrir necesidades de transporte y la adquisición de medicamentos indicados para la anemia hemolítica diagnosticada.
