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Por Ana Margarita González y Rafael Hojas Martínez
Todo lo que hagamos por el regreso de nuestros hijos tiene que estar dirigido hacia Estados Unidos; la eficiencia de nuestra labor tiene que ser mejor, porque Gerardo no puede morirse en la cárcel; en eso el movimiento sindical puede jugar un papel trascendental, afirmó Irma Sehwerert, al intervenir en el Coloquio Internacional de Solidaridad con los Cinco, organizado por la CTC.
Con tristeza recordó un encuentro reciente que sostuvieron los familiares de los Cinco con un grupo de abogados estadounidenses, porque ninguno conocía sobre el caso. “Eso da una idea de hasta donde ese país vive alejado de la realidad que lo circunda. Ser abogado y no saber sobre el juicio más largo de la historia de ese país, parece una historia increíble. Por más que la prensa lo oculte deberían al menos los juristas tener información sobre lo ocurre y tiene relación con su entorno laboral”.
El encuentro se realizó en la sede del Grupo Empresarial LABIOFAM, con la asistencia de dirigentes obreros de 12 países que pasan un curso de formación de instructores sindicales en la Escuela Lázaro Peña. Previamente, dirigentes de la CTC y familiares de los Cinco, participaron en el matutino que desarrollan en la entidad, que estuvo dedicado a la clausura de la Jornada 5 por los Cinco.
De sus tantas vivencias en la lucha por la justicia a favor de los antiterroristas cubanos, la madre de René González, contó la manera atemorizada con que el abogado de Gerardo Hernández, vino por primera vez a Cuba. “Era un abogado de oficio y tuvo que acceder a un caso considerado nada más y nada menos que de espionaje, como falsamente sostiene el gobierno de Estaos Unidos desde el principio y hasta nuestros días.
“A la semana, hablando en casa de mi hijo, confesó que se sentía abochornado de ser norteamericano. Después de hacer sus investigaciones y conocer a Gerardo, ese propio letrado dijo `yo no estoy defendiendo a un hombre, estoy defendiendo a un santo`”.
La ex dirigente sindical cubana, instó a los dirigentes obreros extranjeros y a los cubanos a tocar diariamente las puertas de la Casa Blanca: “a bombardear” a Obama con cartas, tarjetas, llamadas telefónicas, porque él puede, solo con su firma, poner en libertad a los cuatro héroes que nos quedan en sus cárceles.
Sugirió a los líderes sindicales contactar con sus homólogos norteamericanos y personalidades de Estados Unidos e informarlos sobre este caso. Utilicen sus publicaciones, sus eventos, todos los medios que estén a su alcance, y convocó a hacer plantones frente a las embajadas norteamericanas en sus países todos los días cinco de cada mes; saquemos el caso a la luz.
El Comité de Solidaridad por la Liberad de los Cinco del Grupo de LABIOFAM, refirió que los antiterroristas cubanos han contribuido a formar valores dentro de la población penal en cada una de las prisiones donde están encarcelados, enseñando a leer y escribir a reos analfabetos e incluso a orientarlos en cuestiones jurídicas.
Representantes de sindicatos de Colombia, Brasil y Uruguay destacaron las labores que realizan permanentemente en sus naciones los días 5 de cada mes; alzaron sus voces para condenar el encierro de los antiterroristas cubanos y evidenciaron el compromiso de estar al lado de la Revolución cubana, faro y paradigma para los pueblos del mundo, en particular de las naciones latinoamericanas.
Delegados colombianos y uruguayos narraron que la causa de los Cinco no les es ajena, pues le ha permitido identificarse y revivir un pasado no muy lejano en el tiempo, pues muchos de ellos padecieron el encarcelamiento de sus padres, presos políticos víctimas de la opresión de las dictaduras militares apoderadas en las naciones suramericanas durante la década del 70.
Raimundo Navarro, miembro del Secretariado Nacional de la CTC, informó de la labor que realiza esta organización a favor de la causa de los Cinco, esencialmente en foros internacionales y encuentros con sus homólogos de diferentes regiones del mundo.
“No nos podemos conformar con lo hecho hasta ahora, porque todavía ellos están dando el mejor de los ejemplos de dignidad y de amor a la Patria, en condiciones difíciles.
El doctor José Antonio Fraga, director de LABIOFAM, hizo una panorámica de los resultados productivos y económicos de la entidad, que se fundó en 1960, dada la insuficiencia de medicamentos veterinarios que provocó el bloqueo de Estados Unidos contra Cuba. Refirió la labor que extienden a varios países en la lucha contra enfermedades transmitidas por vectores y de los avances en las investigaciones para la obtención de suplementos dietéticos y productos anticancerígenos.
