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Con salvas de artillería y una ceremonia interreligiosa, Bolivia inició hoy los festejos por el aniversario 188 de su independencia, el día en que se libró del colonialismo y abrió el camino a la República.
Las celebraciones centrales por la efeméride, que tienen lugar en la central ciudad de Cochabamba, se iniciaron al amanecer con disparos de fusilería, como aviso de que la gran jornada patria llegó a la nación andina.
Grupos étnicos originarios ofrecieron después sacrificios a la Madre Tierra para pedir por el futuro del país, mientras en algunas iglesias se celebran misas.
Desde ayer, calles y edificios se engalanaron con banderas bolivianas y luces de colores, y hasta los autos que transitan hoy por esta capital lucen cintas con franjas rojas, amarillas y verdes, distintivos de la enseña nacional.
Las celebraciones recuerdan la mañana del sábado 6 de agosto de 1825, cuando la región del entonces Alto Perú comenzó su vida independiente como nación y empezó a llamarse como su libertador: República de Bolívar, un nombre que cambiaría con el tiempo («como Roma viene de Rómulo, de Bolívar vendrá Bolivia», dijeron entonces los diputados).
Hace 188 años, la Asamblea Deliberante en Chuquisaca, en el sur, redactó el Acta de la Independencia que obligó a los cartógrafos desde entonces a ubicar una nueva nación libre en el Cono Sur de América.| RI con información de PL
