Ciudad Ho Chi Minh.- Profundamente impresionado por la lucha heroica de Vietnam y los avances en su desarrollo económico, el primer vicepresidente cubano, Miguel Díaz-Canel concluyó aquí su inicial e intensa jornada de visita oficial a este país.
La primera de esa certeza volvió a constatarla al recorrer el Museo de los Vestigios de la Guerra, que conserva con minuciosidad reveladora fotos y piezas testimoniales de la crueldad de la agresión contra Vietnam.
Situado en pleno centro de esta ciudad exhibe artillería pesada, aviones y maquinaria de bélica empleadas para doblegar la resistencia de los vietnamitas, reproducciones de las celdas de prisioneros, las llamadas Tiger Cage, y muestras gráficas y detalles de los efectos del agente naranja lanzados por la aviación estadounidense.
Díaz-Canel visitó también la Zona Agrícola de Alta Tecnología de Cu Chi, que produce semillas de alto rendimiento, y donde pudo apreciar cultivos de calabazas minúsculas entre las diversas realizaciones, frutos de la aplicación de la ciencia y las investigaciones.
Asimismo reconoció con posterioridad la pujante Zona de Procesamiento para la Exportación Tan Thuan, que comenzó a fomentarse en 1992, y es hoy un exitoso polo económico, con cientos de empresas en operación y campo de inversiones en múltiples rubros.
Durante su estancia sostuvo un encuentro con el miembro del Buró Político del Partido Comunista de Vietnam y Secretario del Comité de la Ciudad, Le Than Hai, en el que ambas partes reafirmaron los tradicionales lazos de amistad y solidaridad entre sus respectivos países y la voluntad de estudiar los procesos de desarrollo en uno y otro.
Este viernes el primer vicepresidente cubano será recibido en ceremonia en el Palacio Presidencial, en Hanoi, donde sostendrá conversaciones oficiales y se reunirá con altos dirigentes del Partido y el Estado.
La delegación que encabeza está integrada además por Leonardo Andollo, segundo jefe de la Comisión de Implantación y Desarrollo; Rogelio Sierra, viceministro de Relaciones Exteriores, y el embajador cubano en Vietnam, Fredesmán Turró.
Tomado de Prensa Latina