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Los miembros de la Unión Nacional de Juristas de Cuba (UNJC) exigieron al gobierno del presidente Barack Obama, el pronto regreso de los antiterroristas cubanos presos desde 1998 en cárceles de Estados Unidos.
Gerardo Hernández, Antonio Guerrero, Fernando González, Ramón Labañino y René González fueron detenidos por alertar a su país sobre planes de acciones violentas fraguados por grupos terroristas basados en territorio estadounidense.
Este caso no es netamente jurídico, lo convirtieron en un proceso político, subrayó la abogada Nuris Piñero en un foro realizado en la sede de la UNJC, al que asistieron una representación de los familiares de los Cinco, amigos de Cuba y la presidenta del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos, Kenia Serrano.
Piñero denunció las continuas irregularidades cometidas durante el proceso, entre ellas la no presentación de pruebas que los incriminen en acciones que atenten contra la seguridad nacional de Estados Unidos.
También criticó el rol desempeñado por los medios de prensa, principalmente de la Florida, para crear un montaje sobre la verdad, y al gobierno de Washington por costear con ciento de miles de dólares esta farsa mediática.
En el caso de los Cinco, además, fueron violadas de manera reiterada sus garantías y el derecho de familia, enfatizó Piñero en el foro enmarcado en la jornada internacional 5×5, que tiene esta vez como principal escenario la capital estadounidese y en ocasión del Día del Trabajador Jurídico.
Piñero aseguró que Obama tiene la autoridad suficiente para hacer regresar pronto a la isla caribeña a los cubanos confinados.
Los expertos presentes coincidieron en que fueron varias las irregularidades del debido proceso, en lo penal y lo familiar, desde el punto de vista del Derecho Internacional y de las propias leyes estadounidenses.
En el caso de René González, luego de cumplir su sentencia en prisión, comenzó a saldar en Estados Unidos otros tres años de libertad supervisada, pero esas condiciones fueron modificadas por la jueza Joan Lenard el 3 de mayo.
Lenard aceptó la permanencia de González en Cuba a cambio de la renuncia a su ciudadanía estadounidense, certificado que le fue concedido por las autoridades de este país el 9 de mayo.
González ofreció detalles sobre el proceso de renuncia a la ciudadanía estadounidense e informó que ahora debe esperar por un pronunciamiento de la jueza, aunque los abogados estiman que le permitirá la permanencia definitiva en su país.
Recordó que dicha moción (solicitud de la pérdida de la ciudadanía de Estados Unidos) «fue presentada en julio del pasado año, pero las autoridades desconfiaron de mí porque no creían que si yo venía a Cuba iría a tramitar mi renuncia».
No se trata de un acto de generosidad por parte de la Fiscalía, en realidad ya no tenían pretexto alguno para no aceptar mi petición de perder mi ciudadanía y venir definitivo para Cuba, pues según ellos yo soy una amenaza para la seguridad nacional de Estados Unidos, subrayó González.
