En horas de la madrugada de este viernes falleció en esta capital, a la edad de 72 años, el compañero Jaime Alberto Crombet Hernández-Baquero, víctima de una prolongada enfermedad.
Desde muy joven, Jaime se integró a las tareas de la Revolución; se graduó en la carrera de ingeniería civil en la Universidad de La Habana, fue el primer secretario de la Unión de Jóvenes Comunistas de ese alto centro docente y posteriormente de la capital del país.
Entre los años 1966 y 1972 resultó electo primer secretario del Comité Nacional de la Unión de Jóvenes Comunistas y, simultáneamente, jefe de la Columna Juvenil del Centenario desde 1968 hasta 1972, responsabilidades en las que descolló como un reconocido líder de la juventud cubana.
Cumplió misiones internacionalistas en la República Popular de Angola como jefe de la sección política del Frente Norte y posteriormente embajador de Cuba en ese hermano país. Ostentaba el grado de coronel de la reserva de las Fuerzas Armadas Revolucionarias.
Desempeñó responsabilidades de dirección en nuestro Partido en los cargos de segundo secretario en la provincia de Camagüey, primer secretario en La Habana y Pinar del Río, y miembro del secretariado del Comité Central del Partido hasta 1990, cuando se le designó Vicepresidente del Consejo de Ministros.
Fue electo miembro del Comité Central del Partido en su Primer Congreso en 1975 y sucesivamente hasta el Sexto en 2012, y diputado a la Asamblea Nacional del Poder Popular desde la primera legislatura en 1976 hasta la séptima, donde llegó a ocupar la vicepresidencia de la misma entre 1993 y 2012.
Representó a Cuba en múltiples eventos internacionales. Recibió numerosas medallas y reconocimientos por los servicios prestados a la Patria y su destacada labor.
Jaime Crombet desempeñó las responsabilidades que le asignó la Revolución con singular fidelidad, modestia y consagración, e incluso, ante su grave enfermedad, mantuvo su espíritu de trabajo y las cualidades que lo caracterizaron siempre y le ganaron el respeto y la admiración de la dirección del Partido, la Revolución y el pueblo.
Su cadáver fue incinerado en la mañana de este viernes y sus cenizas depositadas en la Necrópolis de Colón en horas de la tarde.
Nuestro Partido, Gobierno y pueblo le hacen llegar el más sentido pésame a los familiares del inolvidable compañero.
(Tomado de la AIN)