Los programas especializados en arte y literatura no suelen correr con suerte en el diseño de programación. Ya se sabe que es difícil armar una parrilla, ya se sabe que buena parte de estas propuestas están dedicadas a un público minoritario… pero no parece justo que muchas veces los pongan a competir con espacios de altísima convocatoria en otros canales. Continuar leyendo