Fátima… es un filme desigual, que arroja titubeos tanto en el guion como en la puesta, a pesar de aciertos incuestionables en algunos rubros, tales la música de Ernán López-Nussa, deliciosa y sutil mezcla de motivos cubanos que incluye desde células románticas a lo Cervantes o contradanzísticas (Lecuona), como elementos representativos de la canción y el bolero nuestros. Continuar leyendo