Hombres de larga data en el sector, mujeres que no sucumben a prejuicios y bisoños que llegan y echan raíces conforman el entramado humano del ferrocarril cubano, sosteniéndolo más allá de las limitaciones materiales, creando inquebrantables ataduras afectivas y familiares gracias a las cuales, nadie lo dude, también avanzan los trenes Continuar leyendo