Cada mañana el constructor José Raúl Moncada Almenares es sometido a una rigurosa pesquisa. Si no hay señales de estado gripal, fiebre, malestares, solo entonces abandona el campamento, sube al ómnibus y disfruta de los dos asientos asignados para respetar el distanciamiento en el traslado hacia la obra. Si en tiempos normales se concede prioridad… Continuar leyendo