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A las puertas de la historia llegó Ernesto González Campos el 26 de julio de 1953, cuando participó en el asalto al Cuartel Moncada junto a otros jóvenes de la Generación del Centenario, liderados por Fidel Castro Ruz.
“Es un hombre que convence cuando te habla. No importa si lo hace a tu oído o de cualquier otro modo que lo escuches. Y es que él es el mejor discípulo de las ideas martianas. Por eso me uní a Fidel y seguiremos con él hasta el final” , dijo emocionado durante el homenaje tributado este jueves por la Central de Trabajadores de Cuba (CTC) a 14 combatientes de aquella gesta y a expedicionarios del yate Granma.
En la sede del movimiento sindical cubano, tuvo lugar la bienvenida “a estos hombres que representan tanta historia y hoy tenemos el honor de recibirlos”, como expresó Carmen Rosa López Rodríguez, segunda secretaria de la CTC, en el acto en el que participaron, además, miembros de su secretariado, dirigentes de los sindicatos nacionales, jefes de departamentos y trabajadores de esa organización.
Los agasajados departieron posteriormente con el colectivo del taller de confecciones Opina, donde conocieron las características de ese centro integrado por 43 mujeres y 9 hombres y convertido en una cooperativa no agropecuaria desde el 2013 como parte de un nuevo modelo de gestión económica no estatal y cuyo objeto social abarca producción de prendas de vestir, ajuares del hogar, ventas mayoristas, costura a la medida, alquiler de trajes de novia y disfraces, según explicó su presidenta Doris Lázara Rodríguez .
El funcionamiento de la organización sindical, la remuneración salarial acorde con la calidad y complejidad del trabajo que realizan los operarios, incremento de los ingresos, la distribución de las utilidades en el transcurso del año, el mantenimiento y la reparación del inmueble, estuvieron entre los temas sobre los cuales los homenajeados formularon preguntas a los miembros de la junta directiva y en conversación con varios trabajadores asociados.
Un ameno diálogo con jóvenes trabajadores no estatales también tuvo lugar en el taller de reparaciones generales a teléfonos móviles Los doctores del celular, en el municipio de Centro Habana.
Yenima Suárez, máxima representante sindical en ese pequeño colectivo que aspira a convertirse en Cooperativa no estatal, se refirió a sus orígenes hace cinco años y que no sólo se limita a la función que realizan en las especialidades de informática y la electrónica, pues también interactúan con la comunidad a través de actividades culturales y recreativas en el Taller de transformación del Barrio Príncipe, donde está ubicado.
“Estamos convencidos de la legalidad con la que realizan sus servicios y de la importancia que reviste el trabajo de ustedes, expresó el expedicionario del Granma Arsenio García, en nombre de sus compañeros.
Al responder a preguntas de los Moncadistas, Milagros Vallés Silot, secretaria general del Sindicato Nacional de Trabajadores de las Comunicaciones, la Informática y la Electrónica (SNTCIE), destacó la temprana disposición de estos jóvenes profesionales para afiliarse a esa organización.
Señaló que de los 18 mil trabajadores sin vínculo laboral que ejercen actividades por cuenta propia en el sector de las comunicaciones, más de 14 mil se han incorporado a nuestro sindicato en los últimos dos años, una labor nueva y compleja, pues muchos de ellos laboran de manera aislada como agentes de comunicaciones, agentes postales en zonas rurales, programadores de cómputo, reparadores de antenas y de equipos eléctricos y electrónicos.
Como colofón del homenaje, la Academia de Canto Mariana de Gonitch, que dirige el maestro Hugo Oslé, ofreció en la sede de la CTC una cantata dedicada al 90 cumpleaños del Comandante en Jefe Fidel Castro.
Acerca del autor
Graduado de Licenciatura en Periodismo, en 1976, en la Universidad de La Habana. Hizo el servicio social en el periódico Victoria, del municipio especial isla de la Juventud, durante dos años.
Desde 1978 labora en el periódico Trabajadores como reportero y atiende, desde 1981 temas relacionados con la industria sideromecánica. Obtuvo premio en el concurso Primero de Mayo en 1999 y en la edición de 2009. Es coautor del libro Madera de Héroes.
