Luego de protestas populares exigiendo al Parlamento peruano que la empresa estatal Petroperú administre el yacimiento petrolero Lote 192 de Loreto, la reserva más grande del país, la Comisión de Energía y Minas dio el miércoles su visto bueno a la propuesta, que también prioriza la modernización de la Refinería de Talara.
La decisión gubernamental había descartado con anterioridad la demanda del Frente Patriótico de organizaciones sociales del territorio de otorgar el lote a la empresa estatal. Cientos de peruanos marcharon en contra de la entrega a la transnacional canadiense Pacific Exploration & Production Corporation.
¿Por qué el Gobierno entrega el lote petrolero a la transnacional? Con esa interrogante nos acercamos a Gustavo Espinoza Montesinos, quien este 2 de septiembre fue condecorado con la Medalla de la Amistad, que otorga el Consejo de Estado de la República de Cuba.
“La explicación oficial —dijo Espinoza Montesinos— es que para explotar ese lote hay que invertir 700 millones de dólares que Petroperú no posee; en segundo lugar, porque hay un contrato firmado con una empresa canadiense y no se podría revocar.
“En realidad ambas razones son relativas porque recursos siempre hay, el problema es quien los tiene. En Perú los tiene la oligarquía y el Gobierno no quiere quitárselos, prefiere que el pueblo cargue con el peso del desarrollo y no se atreve a tomar una acción que le permita financiar la explotación de ese petróleo por Petroperú. Tampoco existe la voluntad gubernamental de fortalecer a las empresas del Estado.
“La lucha del pueblo peruano es justa y legítima, merece comprensión y respaldo. Hemos sido solidarios con el paro de Loreto y seguimos siendo solidarios con las acciones que se puedan desarrollar en ese sentido”.
A pesar de las protestas, no se ha dicho aún qué pasará con el contrato suscrito con la empresa extranjera. No se puede olvidar que Perú participa en las conversaciones del Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP, por sus siglas en inglés) impulsado por Estados Unidos, donde se prevé que las grandes empresas pueden demandar a los Gobiernos ante un tribunal comercial internacional si ven dañados sus negocios.
Espinoza es periodista, y en su empeño de justicia abrazó la lucha sindical desde los años 60 del pasado siglo. Fue secretario general de la Confederación General de Trabajadores del Perú hasta 1976. El reconocimiento entregado por Cuba premia su destacado apoyo a la Revolución cubana y a la causa por el regreso de los Cinco Héroes a su patria.
“Me atrevo a decir que hay muchos otros peruanos merecedores de una medalla como la que se me ha conferido. Trataré de ser digno de la lucha y la voluntad de ellos, de los que aún viven y de los que ya se fueron”, expresó tras recibir la distinción de manos de Elio Gámez, vicepresidente primero del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos.