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Por Eyleen Ríos, enviada especial
Toronto.- Hay medallas que se valoran por encima de su rango, que llenan de felicidad por lo que significaron en el contexto en que fueron ganadas.
Eso sucedió este sábado con el bronce en el all around del conjunto cubano de gimnasia rítmica, que puso a celebrar a todos sus seguidores luego de mantener en el Coliseo de Toronto una posición que lograran hace cuatro años.
“Para nosotros esto fue un oro, estamos felices y ahora vamos a buscar más en las finales por aparatos”, dijo la entrenador Nely Ochoa, conocedora del sacrificio que han realizado todas en los últimos cuatro años.
“Veníamos con pronóstico de cuarto lugar, no podía ser de otra manera porque apenas compitieron y se iban a enfrentar a un nivel desconocido para varias de ellas”, aceptó Nely, que además elogió la presentación con cinco cintas.
“En esa estuvieron mucho mejor, en la de tras pares de mazas y dos aros salieron un poco más presionadas”, comentó sobre las ejecuciones sumadas para repartir las medallas de máximas acumuladoras.
Las cubanas, que cambiaron su equipo en un 50 por ciento respecto al 2011, lograron 13.492 puntos con las cintas y 12.200 en el otro programa, válido para llegar a 25.692 y quedar detrás de Brasil y Estados Unidos, en ese orden.
Las sudamericanas vencieron ahora con 30.233, y habían reinado también en Guadalajara, en tanto las norteñas se instalaron esta vez en la segunda plaza con 29.275.
Ni siquiera el ser anfitrionas les sirvió a las canadienses para retener la segunda posición con que llegaron aquí, pues los escasos 23.450 que completaron le enviaron al quinto y último puesto. México cerró cuarto con 24.309.
“Nos sentimos orgullosas de esta presentación. No se preocupen que vamos a dar lo mejor de nosotras para que Cuba vuelva a subir al podio”, agregó en nombre de sus compañeras Legna Savón, una de las que repite del anterior conjunto.
Este sábado también se premió a la máxima acumuladora individual, distinción merecida por la estadounidense Laura Zeng (64.575), bronceada olímpica de la juventud y mejor ahora que su compañera Jasmine Kerber (62.200) y la local Patricia Bezzoubneko (60.399).
La cubanita Brenda Leyva, debutante a este nivel, finalizó décima con 50.767.
