Cargando...
La Vicepresidenta de Panamá, Isabel de Saint Malo, aseguró que el restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre Cuba y Estados Unidos merece reconocimiento y felicitaciones, ya que resulta un paso importante para Latinoamérica.
En declaraciones a Prensa Latina reconoció que esta decisión, esperada por muchas décadas, «abre nuevas oportunidades a un país hermano que es parte de la comunidad latinoamericana».
Sobre el tema de la continuidad de becas para panameños estudiar medicina en Cuba dijo que, en conversaciones sostenidas con el ministro de Salud, Francisco Javier Terrientes, este manifestó que pudiera haber un interés de la institución de continuar el programa, pero aseveró que es una política a definir por esa cartera.
No obstante, resulta importante aclarar que cualquier decisión que se tome no afectará a los estudiantes panameños que están en Cuba actualmente, pues ellos necesitan terminar sus estudios, precisó De Saint Malo.
Recientemente el titular panameño de salud anunció que evalúan la posibilidad de cancelar esta iniciativa, vigente desde 2006, debido a la falta de disponibilidad de fondos para sufragar becas para que panameños estudien medicina en la isla.
En conferencia de prensa, la también Canciller de Panamá se refirió a la situación que actualmente presentan empresas radicadas en la Zona Libre de Colón, a las cuales se les adeudan altos montos desde el exterior.
«Con Venezuela no tenemos una deuda, sino una situación de disponibilidad de divisas porque las empresas panameñas necesitan dólares y no bolívares», aclaró De Saint Malo, al tiempo que reconoció los avances en las negociaciones y el compromiso del gobierno de ese país de resolver el asunto.
Sobre la migración, otro de los temas indagados por Prensa Latina, la ministra de Relaciones Exteriores expresó que la situación migratoria de todos los extranjeros que están radicados en Panamá tiene una solución diferente a los nuevos inmigrantes.
Acotó que no sería responsable ni humanitario hacerle un cambio de estatus, después de trabajar, ganarse la vida y hacer un aporte a la economía nacional, y otra bien distinta es la necesidad de definir una política migratoria.
«Somos un país que crece, y existen áreas de la economía donde la mano de obra extranjera resulta un aporte importante. Pero es hora de definir con mayor precisión cuál es el tipo de migración que este país necesita y promoverla con ciertos requisitos», concluyó.
Tomado de PL
