EPG Los Naranjos: Alimento y atención para el ganado

Por María Caridad Guindo Gutiérrez 

Más de cuatro décadas de experiencia permiten a Gonzalo Pimentel Tabares afirmar que “el principal problema de la ganadería en Cuba radica en la falta de alimentos”, por tanto en la Empresa Pecuaria Genética Los Naranjos prevén la siembra de más de 500 hectáreas de pastos y forrajes y 60 de ellas de plantas proteicas, un empeño que no puede esperar.

Conscientes de esa realidad comenzaron desde 2014 a potenciar el cultivo de morera, moringa, tithonia y nacedero en sus 10 unidades ganaderas y en un área demostrativa de 14,5 hectáreas, de las cuales siete están cubiertas por estas variedades, y el resto de caña, frutales, pastos y forrajes.

“Aspiramos a sustituir el pienso y elevar la calidad de los alimentos voluminosos para lograr el estado físico y la reproducción adecuada de nuestros animales”, explicó Pimentel Tabares, quien es responsable de la actividad agrícola. También ofertan semillas a los interesados en incorporar a la dieta animal dichos cultivos.

Las plantas proteicas generan un saldo positivo en el incremento de la masa y de la producción de leche entre 1,5 y 2 litros por vaca. “Si logramos plantar al máximo en la etapa lluviosa, obtendremos beneficios. Se trata de plantas permanentes, a las cuales se les dan 4 o 6 cortes anuales y rebrotan vigorosamente con pocas atenciones agrotécnicas”.

Pimentel insiste en la necesidad de atender los intereses de los animales, algo que quizás pueda parecer absurdo, sin embargo resulta vital en el desarrollo de la ganadería, especialmente de forma intensiva y estabulada. El rescate de los traductores permitiría conocer cuándo se sienten mal por falta de espacio, calor, maltrato, o escasez de agua.

Esta última deben tomarla limpia, de forma abundante y permanente. “La vaca consume de alimento 36 veces el equivalente a su peso corporal; mientras, de agua ingiere 86 veces su peso. Soporta 60 días sin comida y solo siete sin agua”.

Utilizar racionalmente los recursos naturales, jamás confundir la maleza con el pasto, rotar la siembra del mismo, hacer las cosas en el momento oportuno, sin chapucerías, constituyen algunas de las recomendaciones de este avezado agricultor.

Bien lo sabe Edy Matanzas, obrero en cuadra en el centro de ceba El Toril, a donde llegan los añojos con 150 kilos o más, y 11 trabajadores deben procurar que alcancen hasta 400 kilos.

Tienen 239 animales pertenecientes a las razas siboney, criollo, charolaise, crimousín, búfalo, cebú lechero y comercial y holstein mestizo, y vienen de las UEB productoras de ganado vacuno, ubicadas en Alquízar, Artemisa y Caimito.

Sin embargo, el abasto de agua se dificulta, ya que las fuentes trabajan con energía eléctrica, pues los pozos se encuentran muy profundos y no pueden colocar molinos a viento.

Mejoras genéticas y otros compromisos 

La producción de animales de alto valor genético, misión principal de la empresa, precisa de una alimentación balanceada y sana. La misma se ha visto afectada por la carencia de insumos tales como fertilizantes, herbicidas, instrumentos de trabajo, machetes, limas, alambres, tractores, máquinas para la producción de heno y silos. En cambio, “hemos recuperado instalaciones, áreas de forraje, así como proyectos genéticos con mínimos recursos”, afirma Pimentel.

Prestan especial interés a la reproducción y al mejoramiento de las razas, por eso ya formaron a la mayoría de los sementales incluidos en el plan, cuentan con 240 madres entre sus más de 5 mil vacas y desarrollan 18 proyectos genéticos.

Con una masa total de 20 mil cabezas de ganado vacuno, ovino caprino y bufalino, Los Naranjos dedica esfuerzos a la recuperación de la entrega de leche a la industria. “Hemos crecido en unos 800 mil litros en los últimos cuatro años y para 2015 pensamos alcanzar 5 millones, aunque nos proponemos recuperar 34 mil litros que debemos a la industria”, sostiene el director Luis Alberto Hernández.

Solo el empeño de sus mil 950 trabajadores, más del 85 % vinculados directamente a la producción, podrá contribuir al desarrollo integral de Los Naranjos, una entidad fundada por el Comandante en Jefe el 28 de mayo de 1964 y vinculada a la población y a la vida económica de la provincia. Esa tendencia debe continuar creciendo para beneplácito de los artemiseños.