El secretariado del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, la Ciencia y el Deporte (SNTECD), tomando la historia como punto de partida, reconoce en esta fecha al contingente de Maestros Voluntarios, que a inicios de la Revolución (1959) convocó a cientos de ellos para llevar la luz de la enseñanza a los rincones más inhóspitos y olvidados del país.
Esta fue la razón que impulsó al SNTECD, representado por su secretario general, Ismael Drullet Pérez, a publicar esta carta de homenaje y recordación a quienes en aquel entonces acogieron la tarea con entusiasmo y empeño.
Por esta razón, Trabajadores, en su edición digital, publica el texto, como una forma no solo de tener presente la efeméride, sino de reconocer la actitud de quienes llevaron a la práctica esa epopeya alfabetizadora en el siglo pasado.
La Habana, 22 de abril de 2012
“Año 57 de la Revolución”
Queridos Maestros Voluntarios:
Aquel 22 de abril de 1960 se produjo una convocatoria sin precedentes, Fidel llamó a la juventud a una de las más
trascendentales tareas de choque de la Revolución cubana:
«…necesitamos maestros. Necesitamos mil maestros que quieran dedicarse a enseñar a los niños campesinos. Hace falta que nos ayuden para mejorar la educación de nuestro pueblo… Hace falta que convivan con los campesinos, que les comuniquen sus experiencias y les infundan sus conocimientos». De la entusiasta y masiva respuesta de los jóvenes y de la incondicional actitud de los que se formaron en los campamentos de la Sierra Maestra nació el movimiento de los Maestros Voluntarios.
Hoy, aunque parece muy lejano el inicio de aquella extraordinaria batalla cultural, resulta aleccionador en los tiempos que corren destacar el alto sentido humanista y revolucionario de aquella hazaña que contribuyó a sentar las bases de nuestro ascendente desarrollo cultural y al carácter paradigmático de la educación cubana en el actual entorno continental.
Los Maestros Voluntarios se integran por derecho propio a la historia de la mejor tradición pedagógica cubana y en su legado ejemplar se nutre el principio de convicción revolucionaria que, como expresión de nuestro sentimiento patriótico, sustenta a la Revolución Cubana.
Los Maestros Voluntarios integran por siempre el patrimonio simbólico de la educación cubana.
¡Honor y gloria a nuestros Maestros Voluntarios!
Sindicato Nacional de los Trabajadores de la Educación, la Ciencia y el Deporte (SNTECD)