El actual panorama laboral en Cuba tiene alta incidencia en el quehacer de los abogados laboralistas ante el contexto derivado de la actualización del modelo económico y la implementación de los Lineamientos aprobados por el VI Congreso del Partido.
En entrevista para este semanario, Elio Valerino Santisteban, asesor jurídico de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC), precisó que en nuestro ámbito específico el país tiene hoy un escenario laboral en el cual hay nuevos sujetos.
“Ahora hablamos de trabajadores estatales y no estatales, por tanto las acciones u objetivos que se ha trazado el movimiento sindical están dirigidos a brindarles atención, organización y representación a unos y a otros.
“Como abogados, es una tarea que se nos complejiza. Tenemos que adentrarnos en temas como el derecho tributario, económico, financiero y administrativo, es decir, todo aquello que de un modo u otro incide en el trabajo no estatal”.
Para profundizar en este asunto, Valerino expone: “Hoy hay nuevas formas de gestión. Cuando hablamos de una cooperativa, no están solamente las agropecuarias, sino aquellas que no lo son y donde aparecen socios dentro de una estructura organizativa y ahí ya las relaciones que nacen dejan de ser de carácter laboral y adquieren un carácter societario y civil, lo cual obliga al abogado a buscar elementos sobre esta actividad”.
¿Cuál es la situación actual?
“En el país contamos con más de 30 abogados ubicados en los sindicatos nacionales y comités provinciales de la CTC, así como en determinados municipios dada su complejidad o lejanía de la cabecera provincial. Algunos de estos especialistas forman parte de un contrato con la organización nacional de bufetes. En La Habana están presentes en todos sus municipios y laboran un día a la semana.
“Nos hemos trazado una meta: el acompañamiento en la representación de aquel trabajador que tenga un determinado problema y previo acuerdo con el secretariado de su sindicato ese abogado lo representa de manera gratuita en cualquier instancia, llámese judicial o administrativa, y la persona no está obligada a acudir a un bufete y pagar por un servicio.
“Hay que lograr que el trabajador no deambule de un lugar a otro sin saber a dónde dirigirse y hasta sin conocer que tiene el derecho a ser representado por su organización sindical mediante ese abogado que cumple tal función”.
Valerino también se refirió a la reciente creación de una oficina para la atención a los trabajadores que radicará en un lateral de la sede de la CTC con locales análogos en los sindicatos nacionales y en todos los territorios para recepcionar y atender las quejas y reclamaciones, y allí se determina la tramitación de la inconformidad o planteamiento.
“La oficina —añadió— cuenta con un abogado de guardia y dispone de un servicio de asesoría legal de manera directa y sistemática siempre que se estime necesario, porque hay casos que no requieren de un tratamiento jurídico, sino sindical.
“Como estrategia, nos hemos propuesto que más del 90 % de los casos que lleguen acá tienen que ser atendidos por el sindicato al cual está afiliado ese trabajador.
“La CTC no suplanta el papel que le corresponde al sindicato. Estos tienen autonomía y personalidad jurídica.
“Cuando un trabajador está en desacuerdo con el tratamiento dado, entonces la CTC revisa la actuación del sindicato y puede tomar decisión al respecto”.
De cara al proceso de discusión del proyecto de nuevo Código de Trabajo, ¿qué tareas tienen ante sí los abogados laboristas?
“Nos corresponde una misión fundamental, a través de los puestos de mando que están creados en las provincias y municipios y cuentan con el personal capacitado que estará a cargo de recepcionar todos los planteamientos y sugerencias que puedan dar los trabajadores en la base sobre esa norma jurídica, para que lleguen a la instancia nacional y puedan adoptarse las decisiones más acertadas en cuanto a esas valoraciones”.
Acerca del autor
Graduado de Licenciatura en Periodismo, en 1976, en la Universidad de La Habana. Hizo el servicio social en el periódico Victoria, del municipio especial isla de la Juventud, durante dos años.
Desde 1978 labora en el periódico Trabajadores como reportero y atiende, desde 1981 temas relacionados con la industria sideromecánica. Obtuvo premio en el concurso Primero de Mayo en 1999 y en la edición de 2009. Es coautor del libro Madera de Héroes.