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La Habana.- Con la cancelación de un policromo sello postal alegórico al 65 aniversario de la fundación de la República Popular China, el 1 de octubre de l949, fue conmemorada en el Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos la histórica efeméride de la gran nación asiática socialista.
Tras acuñar la emisión de la estampilla, al igual que lo hiciera Zhang Tuo, embajador de la RPCH en nuestro país, Caridad Diego, presidenta de la Asociación de Amistad Cuba-China, hizo un recuento de las sólidas relaciones de amistad, colaboración y amistad que unen a ambos pueblos.
Recordó que con la fundación de la República Popular China, proclamada ese día en la Plaza Tiananmen por el el Presidente Mao Zedon y el triunfo de la Revolución cubana 10 años después, los nexos bilaterales, forjados en las luchas de Cuba por su independencia, adquirieron una nueva y dinámica dimensión y que hoy día ellas se caracterizan por su continuidad, apoyo mutuo, la cooperación y un fluido intercambio al más alto nivel.
Destacó que el pasado 28 de septiembre se cumplieron 54 años del establecimiento de las relaciones diplomáticas entre ambas naciones, hecho que situó a la mayor isla del Caribe como el primer país de América Latina en reconocer a la República Popular China y establecer con ella estrechos vínculos.
Por su parte, Zhang Tuo, afirmó que estos 65 años de existencia de la República Popular China fueron de luchas, cambios, reformas, aperturas y éxitos que han permitido erradicar el hambre en la nación de más de mil 300 millones de habitantes, y colocarla como la segunda economía a nivel global.
«China ha puesto fin a la miseria y construye su camino de desarrollo propio, al tiempo que ofrece su contribución al mundo», subrayó.
Acerca de las relaciones con Cuba, afirmó que estas son excelentes y se desarrollan más cada día basadas en las características de ser pueblos amigos, compañeros y hermanos, con una hermosa tradición de amistad, cooperación y solidaridad.
El elemento central del sello postal lo constituye la Plaza de Tian’anmen o Plaza de la Puerta de la Paz Celestial, construida e ideada dentro del plan urbanístico de la capital Beijing, convirtiéndose en un símbolo de la nueva China. En su parte delantera y trasera se destacan símbolos de la República Popular China. Uno es la bandera nacional, que ondea vigorosamente, junto a dos palomas, que representan la paz y el otro es la Flor Nacional, la Peonía.
A los lados se aprecia la Gran Muralla que distingue internacionalmente a la nación asiática así como otros elementos y edificaciones que ilustran el desarrollo actual alcanzado por China. Entre estos, un cohete despegando al espacio, el Estadio Nido de Pájaros que sirvió de sede principal a las Olimpiadas de Beijing en el año 2008 y la Zona Franca Comercial de Shanghai.
Todo ello en armonía con fuegos artificiales, que demuestran el júbilo popular por la celebración del 65 aniversario de la fundación de la República Popular China
La actividad cultural estuvo a cargo del cuarteto Laúdes de La Habana.
