El ministro de Relaciones Exteriores Bruno Rodríguez Parrilla expresó este jueves profunda preocupación por la escalada de violencia de Israel contra Palestina y afirmó que el poder del veto empleado ayer por Estados Unidos en el Consejo de Seguridad, con el cual paralizó una propuesta de hacer llegar ayuda humanitaria a Gaza, evidencia las limitaciones de procedimiento de las Naciones Unidas.
El Canciller expresó sus condolencias a las comunidades árabe y hebreas residentes en Cuba y afirmó que la actual situación en Gaza, y también, de alguna forma, en Cisjordania, son consecuencia de las más de siete décadas de ocupación ilegal y colonización de Israel de las tierras palestinas, en flagrante violación del Derecho Internacional (DI), del Derecho Internacional Humanitario (DIH) y de la Carta de las Naciones Unidas.
Ante la prensa acreditada en La Habana, Rodríguez Parrilla recalcó que “Cuba rechaza, y ha rechazado siempre, la muerte de civiles y personas inocentes de todas las partes involucradas en este conflicto, sin diferenciar etnia, nacionalidad o fe religiosa, y condena en los términos más enérgicos los asesinatos de civiles, especialmente de mujeres, niños y de trabajadores humanitarios del sistema de Naciones Unidas”.
El diplomático impugnó los bombardeos indiscriminados contra la población, la destrucción de viviendas, hospitales e infraestructura civil, así como el bloqueo a los servicios de agua, alimentos, electricidad y combustible a la franja palestina, proceder que clasifica como genocidio y se suma a la cada vez más larga lista de violaciones israelíes al DIH.
La postura de Cuba es de total solidaridad con Palestina y de apoyo a una solución amplia, justa y duradera del conflicto que tome en cuenta el derecho de la nación árabe a existir como Estado soberano e independiente, con fronteras en los límites anteriores a 1967, con Jerusalén Oriental como capital, y con garantías internacionales que permitan el retorno de los refugiados.
“Cuba llama al urgente cese del fuego y a facilitar de inmediato la entrada de ayuda humanitaria a Gaza”, subrayó el canciller, y advirtió que la violencia solo contribuirá a exacerbar tensiones y agravar el impacto humanitario sobre los civiles.
Rodríguez Parrilla denunció la sistemática complicidad de EE.UU. frente a las agresiones de Israel: “La impunidad con la que actúa Israel solo puede explicarse por su plena confianza de que no habrá consecuencias por sus actos y que cuenta con el respaldo del Gobierno de Estados Unidos y de otros aliados de la OTAN.
En su anhelo de que se restablezca la paz en la zona, Cuba ha propuesto que la Asamblea General de la ONU reanude sus sesiones de forma extraordinaria e inmediata y apruebe acciones que conduzcan al cese de la violencia. Ha solicitado que se movilice, con urgencia y bajo la coordinación de Naciones Unidas, ayuda humanitaria de emergencia para enfrentar la catastrófica situación en Gaza y llama a todas las partes involucradas a facilitar su entrada y distribución entre la población afectada.
Rodríguez Parrilla convocó a que la Asamblea General y el Consejo de Seguridad adopten las medidas necesarias para garantizar protección internacional a la población palestina; y que los diferentes mecanismos de concertación política e integración (Movimiento de Países No Alineados, Grupo de los 77 y China, Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, entre otros) desempeñen un rol activo que ponga fin a la violencia.
Cuba, mejor sin bloqueo
Horas antes del encuentro con la prensa para abordar la situación palestina, Bruno Rodríguez presentó ante el cuerpo diplomático acreditado en Cuba, los argumentos de por qué el bloqueo impide el desarrollo del país y el bienestar de sus habitantes.
El informe de Cuba expone y contabiliza los daños de esa política, datos que serán presentados los venideros días 1 y 2 de noviembre, ante los 193 Estados miembros de la Asamblea General de las Naciones Unidas, llamados a pronunciarse acerca de la resolución “Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América contra Cuba”.
Según datos revelados por Rodríguez Parrilla, el perjuicio acumulado durante más de seis décadas de aplicación de esa política de hostilidad asciende a 159 mil 84 millones de dólares, que equivalen 1 billón 337 mil 57 millones de dólares si tomamos en cuenta el comportamiento del valor del oro en el mercado internacional.
De esa cifra total, corresponden a afectaciones recientes (marzo del 2022-febrero 2023) 4 mil 867 millones de dólares, unos 405 millones de dólares mensuales.
Esta será la ocasión número 21 en que Estados Unidos quedará expuesto y solo ante la comunidad internacional debido a esa política irracional y unilateral contra Cuba, que busca derrocar a la Revolución.