El Cuerpo de Guardabosques de Cuba denunció que su Campaña de protección contra incendios forestales transcurrió en un contexto económico–social desfavorable, principalmente a consecuencia del recrudecimiento del bloqueo impuesto al país por el gobierno de Estados Unidos.
La creciente agresividad estadounidense a la nación impidió la adquisición de recursos y equipos necesarios para enfrentar los fuegos de ese tipo y obligó a posponer actividades planificadas, advirtió la institución en un resumen de su más reciente cruzada, de enero a mayo pasado, facilitados a la Agencia Cubana de Noticias.
Señaló que el estallido de las deflagraciones y sus afectaciones se comportó en correspondencia con lo apreciado desde el inicio de la cruzada, cuando hubo consenso en que sería intensa y también por el impacto de fenómenos meteorológicos adversos, como altas temperaturas, escasas precipitaciones y fuertes vientos de componente sur.
Durante los cinco primeros meses del año se reportaron 613 incendios forestales, que dañaron 13 mil 980,51 hectáreas de bosques y 489.50 de herbazales de ciénaga, mientras que los territorios con mayores cifras resultaron Pinar del Río (141), Holguín (79), municipio especial de la Isla de la Juventud (69), Artemisa (45) y Matanzas (40).
En cuanto a su ocurrencia, añadió, los meses de enero, febrero y marzo alcanzaron la mayoría de ellos con 492 y áreas impactadas en cantidades que superaron lo acontecido en igual período de 2011, cuando hubo un record de 335.
De acuerdo con las estadísticas suministradas por el Cuerpo de Guardabosques de Cuba, 11 obtuvieron la categoría de grandes (entre 50.1 y 200 hectáreas) en las provincias de Pinar del Río, Ciego de Ávila, Las Tunas, Holguín y Guantánamo.
Seis la de muy grandes (más de 200 hectáreas) en Pinar del Río, Artemisa, Camagüey y Holguín, y en esta última territorio el originado en Pinares de Mayarí se combatió durante 28 días y afectó el Parque Nacional La Mensura-Piloto en un estimado de 5 mil 845 hectáreas de bosques naturales y plantaciones.
Entre ambos acumularon 9 mil 340.04 hectáreas de bosques, el 73.15% del total.
Las negligencias ocuparon el 96%, cuya principal causa consistió en quemas para varios fines (28%),al igual que pescadores y cazadores furtivos (20%), circulación de vehículos con desperfectos técnicos en el sistema de escape de los gases de la combustión interna (mata-chispas) (19%), fumadores y transeúntes irresponsables (16%), y castradores de colmenas (9%).
En cuanto a la efectividad del Sistema Nacional de Protección contra Incendios Forestales en el período de enero a mayo, por cada mil hectáreas de superficie cubierta de bosques se dañaron 3.85 hectáreas, lo que implicó el incumplimiento de la disminución de hasta 2 hectáreas o menos sus afectaciones.
Más del 80 por ciento de ellos pudo ser controlado antes de las 5 hectáreas, cuando la norma era de 70% y en su totalidad se determinó su causa de origen al 99.7%, un indicador que se redujo en un tres por ciento.
Una evaluación general del comportamiento de sus indicadores, ratificó, de forma gradual y sostenida, una mayor efectividad del Sistema Nacional de Protección contra Incendios Forestales e incluso el mantenimiento en un rango permisible las afectaciones ocasionadas. .
Las acciones preventivas estuvieron dirigidas principalmente hacia los 33 consejos populares identificados a inicios del período crítico con alto índice de causalidad y tuvieron el acompañamiento de las organizaciones de masas, los gobiernos, el Partido Comunista de Cuba, los administradores, tenentes y los pobladores de cada territorio.
Las autoridades correspondientes impusieron 3 mil 250 contravenciones por los Decretos 268 (Ley Forestal) y 52 (Suelos) por un valor de 425 mil 800 pesos, y las pérdidas económicas se estiman en más de 309 millones de pesos, sobre todo en las provincias con mayor incidencia: Pinar del Río y Holguín en los incendios de grandes proporciones de Montezuelo y Pinares de Mayarí, respectivamente.
Los niveles de respuesta estuvieron limitados por la carencia de recursos y equipos, pero la efectividad alcanzada estuvo asociada a la actitud de las fuerzas del Cuerpo de Guardabosques, de las empresas agroforestales y de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, que combatieron la mayoría de los incendios forestales en condiciones desfavorables. (Tomado de ACN)