Cargando...Las transformaciones en la empresa estatal y el papel que esta puede desempeñar ante problemas como la inflación centraron el análisis de un taller con académicos y empresarios que la Asociación Nacional de Economistas y Contadores de Cuba organizó este fin de semana en el Hotel Habana Libre.
El doctor José Carlos del Toro, director general de investigaciones financieras y contables del Ministerio de Finanzas y Precios, explicó que la creación de reservas voluntarias por las empresas a partir de las utilidades tiende a crecer en los destinos que extraen liquidez de la entidad, los cuales representaron el 60% al cierre de 2020, en su mayor parte para distribuir entre los trabajadores.
Todavía no se perciben a las reservas voluntarias como una fuente de financiamiento por la reinversión de utilidades y la capitalización de recursos financieros, consideró el especialista, quien alertó que la monetización de ese dinero como ingresos adicionales resulta estimulante para el colectivo laboral, pero también riesgoso en medio de un proceso inflacionario como el que vive la economía.
Coincidentemente, el doctor Humberto Blanco Rosales, investigador del Centro de Estudios de la Economía Cubana, enumeró entre las acciones que puede acometer la empresa estatal para contribuir a disminuir la inflación la evaluación sistemática de sus sistemas de retribución, junto a la mejora de sus procesos claves, la alianza con proveedores, la transformación digital y el análisis del modelo de negocios, entre otras acciones.
Crear un marco institucional coherente y lograr una estabilidad regulatoria fue la recomendación, por su parte, del profesor de la Facultad de Economía de la Universidad de La Habana, Luis del Castillo Sánchez, quien abogó por acelerar la promulgación de una Ley de empresas en Cuba, e intencionar más el fomento de la propiedad social: “¿Por qué de los proyectos de desarrollo local hoy surgen en su mayoría mipymes privadas?”, cuestionó.
Directivos de empresas exitosas trasmitieron también sus experiencias, entre ellos Francisco López Gascón, director económico del Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología, quien sugirió evaluar aspectos prácticos como la posibilidad de distribuir también un anticipo de las utilidades al cierre del cuarto trimestre, y ampliar prerrogativas legales en el uso del fondo para la adquisición, reparación y construcción de viviendas, lo cual permitiría beneficiar a más trabajadores.
Ajeno a todo lo demás, sí, es un excelente trabajo y artículo. Al menos sobre el tema de cómo gestionar las utilidades para estimular más la producción y desarrollar la empresa al tiempo que legítimamente se favorezcan sus trabajadores. Propio del tipo de autogestión que decidamos construir y la medida hasta dónde nos propodremos enmendar nuestra propiedad estatal y su autoridad. La china, la vietnamita, hasta donde sabemos han traido florecimiento de la economía y la sociedad, en ambas, hasta donde conocemos, el Partido intenta mantener un balance social y político. También la autogestión yugoslava de Tito con los conceptos de liberación de las fuerzas productivas hicieron muy competitiva a la economía de ése país. En él, valga recordar que otros factores dividieron el interés general del Estado y, fracturaron su autoridad, fragmentaron sus intereses sociales generales, fermentó la desunión y vulnerabilidad hasta ser totalmente destruido por fuerzas externas. «De todo hay en la viña del Señor». Nuestra autogestion empresarial, seguro será la cubana.
Gracias.
Ajeno a todo lo demás, sí, es un excelente trabajo y artículo. Al menos sobre el tema de cómo gestionar las utilidades para estimular más la producción y desarrollar la empresa al tiempo que legítimamente se favorezcan sus trabajadores. Propio del tipo de autogestión que decidamos construir y la medida hasta dónde nos propodremos enmendar nuestra propiedad estatal y su autoridad. La china, la vietnamita, hasta donde sabemos han traido florecimiento de la economía y la sociedad, en ambas, hasta donde conocemos, el Partido intenta mantener un balance social y político. También la autogestión yugoslava de Tito con los conceptos de liberación de las fuerzas productivas fundamentados por Stane Dolanc, Edvar Kardelj hicieron muy competitiva a la economía de ése país. En él, otros factores dividieron el interés general del Estado y fracturaron su autoridad, fragmentaron sus intereses sociales generales. «De todo hay en la viña del Señor». La nuestra seguro será la cubana.
Gracias.
Ajeno a todo lo demás, sí, es un excelente trabajo y artículo. Al menos sobre el tema de cómo gestionar las utilidades para estimular más la producción y desarrollar la empresa al tiempo que legítimamente se favorezcan sus trabajadores. Propio del tipo de autogestión que decidamos construir y la medida hasta dónde nos propodremos enmendar nuestra propiedad estatal y su autoridad. La china, la vietnamita, hasta donde sabemos han traido florecimiento de la economía y la sociedad, en ambas, hasta donde conocemos, el Partido intenta mantener un balance social y político. También la autogestión yugoslava de Tito con los conceptos de liberación de las fuerzas productivas fundamentados por Stane Dolanc, Edvar Kardelj hicieron muy competitiva a la economía de ése país. En él otros factores dividieron el interés general del Estado y fracturaron su autoridad, fragmentaron sus intereses sociales generales. «De todo hay en la viña del Señor». La nuestra seguro será la cubana.
Gracias.
Estimados amigos artesanos de la ciencia, permitanme meterme donde los medios nos invitan. Al menos en el pequeño fragmento del taller académico donde tengo como única facultad en el tema ser también uno de los afectados mundanos por la inflación.
Lo que trasluce en estos momentos es cómo emplear las utilidades en favor de un estímulo a la eficiencia de la propiedad estatal, la cual supone un interés muy diferente a la propiedad privada, parten ambas también de presupuestos muy diferentes. A no ser que en nuestro afan de autogestionar utilidades fragmentemos los interes sociales generales, incluso antes de devolver o pagar, de incluir la deuda social que simpre arrastrará consigo la propiedad estatal. Si eso también fue parte del taller no tengo nada que cuestionar, objetar y menos la pericia de aportar una solución. A no ser llamar la atención sobre este aspecto, el «interés social» (acreedor) para que sea incluido en la distribución grupal o reparto individual de lo que se produzca y luego denomine como utilidades voluntarias o no, depende cómo se lo autoestablezca cada colectivo por separado para lo cual se requiere también una contabilidad cientificamente conciente sobre lo que es ageno al grupo, cuando el interés se reduce a una empresa.
Se que en términos científicos todo es cuestionable, tal vez todo sea así, auque objeto que menos el efecto real del momento que estamos viviendo, donde la teoría socio-economica al parecer viene también ya retardada, respecto a la necesidad práctica de la mayoría que lo acedita todo, hasta ese importante taller.
Gracias por la invitación de Trabajadores.
Excelente relato. Ideas esenciales para un sistema empresarial estatal que agoniza.