Mientras los 2 mil 400 trabajadores de los Laboratorios Aica recibieron en abril último un pago promedio por concepto de adelanto de las utilidades equivalente a 3,3 veces su salario, en la Empresa para el Cultivo del Camarón (Eccam) ese ingreso osciló en medio salario adicional para sus más de mil 800 empleados, y la entidad mixta Aguas de La Habana no pudo distribuir nada por ese concepto entre sus casi 4 mil integrantes, al reportar pérdidas.
Así de diversas son las experiencias al cierre del primer trimestre del 2021, en cuanto a la aplicación de una de las medidas más novedosas para el perfeccionamiento del sistema empresarial en el contexto de la Tarea Ordenamiento que acontece en el país.
Con el incremento salarial que implicó la unificación monetaria y cambiaria desaparecieron la mayoría de los sistemas de pago mensual por resultados que suplían las viejas incongruencias y parches, y surgió entonces como principal componente móvil de los ingresos esta posibilidad de repartir un adelanto de hasta el 30 % de las utilidades empresariales al cierre de cada trimestre.
Trabajadores visitó varios colectivos de distintos sectores para constatar cómo transcurrió ese proceso, qué papel tuvo el sindicato y cuáles son las percepciones de los trabajadores sobre este beneficio.
Simplicidad y transparencia
“Fue todo bastante claro, y aunque demora más obtenerlo por ser trimestral, es más el dinero que uno recibe”, apreció Susana Gómez González, especialista en radioquímica que labora en el control de la calidad de los Laboratorios Aica, quien mostró su satisfacción a pesar de que, en su caso, el monto que ingresó fue menor al de otros compañeros, porque solo pudo trabajar dos meses.
El tiempo real laborado y la evaluación del desempeño, en correspondencia con la complejidad de cada cargo, son los indicadores fundamentales para esa distribución de utilidades, que jefes intermedios como Vladimir Simancas Castellanos, director de gestión de la calidad, calificó como una forma más sencilla de retribución, en relación con sistemas de pago precedentes.
“Fue una distribución transparente y rápida”, expresó Rinelia Martín Lago, secretaria general del buró sindical en Aica, al evaluar el reglamento y la forma de pagar este primer anticipo a cuenta de las utilidades anuales, que reportó ingresos adicionales por trabajador entre cinco y 24 mil pesos como mínimo y máximo, en esa importante industria farmacéutica con cinco unidades empresariales de base (UEB) que produce medicamentos inyectables, incluida ahora la producción masiva del candidato vacunal Abdala.
Su director general, Antonio Vallín García, aclaró además algunas de las decisiones que debieron adoptar, legislación en mano y con las potestades que detenta el consejo de dirección, para agilizar el proceso y ser la primera entidad de su grupo empresarial en repartir ese ingreso adicional en la segunda quincena de abril.
“Si pagábamos con arreglo a lo que hizo cada UEB, en la más productiva sus trabajadores habrían recibido un equivalente a 8,7 salarios y en la menos, solo 1,3. Por eso acordamos establecer un fondo común de utilidades en la empresa, lo cual permitió promediar 3,3 veces el salario de cada trabajador”, argumentó el directivo.
Sin grandes reuniones, a partir de la información en los matutinos y de los dirigentes administrativos y sindicales directos en cada área, esa explicación fluyó al colectivo con rapidez y aceptación mayoritaria. Como ventaja adicional, este método favorece también la unidad dentro de la empresa, al facilitar las promociones y movimientos internos entre las distintas UEB, lo cual no resultaba estimulante con los viejos sistemas de pago por resultados específicos de cada planta.
“El contexto legal y económico cambia constantemente, y este tipo de reglamento por supuesto estará sujeto a revisión periódica. La decisión colectiva fue que esta era la mejor forma de distribuir las utilidades ahora, pero ello no implica que en otro momento no podamos distinguir entre las UEB más y menos productivas”, razonó.
Otra solución interesante fue posponer la liquidación de utilidades a quienes causen baja en el período, hasta el cierre del ejercicio fiscal anual, teniendo en cuenta que ese pago trimestral busca estimular a los trabajadores en activo.
Otro costo de la vida
Con más de mil 800 trabajadores, la mayoría técnicos y obreros acuícolas, en instalaciones de seis provincias, la Eccam también tuvo una experiencia positiva en este inicio del año, al conseguir al cierre de marzo utilidades que le permitieron distribuir en la primera quincena de mayo un anticipo que osciló entre los mil 500 y 3 mil pesos como promedio, equivalente a la mitad del salario mensual de cada cargo.
“La reforma salarial ordenó la pirámide en cuanto a la retribución según la complejidad y responsabilidad de cada puesto, y ello permite que cada trabajador participe de las utilidades en correspondencia con ese aporte específico”, expresó Orlando Jiménez Vargas, director general de la Eccam.
Esta empresa fundamentalmente exportadora con un ambicioso plan anual de 7 mil toneladas de camarones para este 2021, cosechó en este período inicial del año el resultado de un efecto colateral de la Tarea Ordenamiento, pues empleó en su mayor parte materias primas adquiridas a la tasa de cambio anterior de un peso por un dólar, y vendió a la nueva tasa de 24 pesos por cada dólar exportado.
Después del pago de impuestos, del rendimiento de la inversión estatal, y la creación de las reservas, Eccam pudo distribuir entre sus trabajadores alrededor de 3,2 millones de pesos en adelanto de las utilidades, lo cual complementa el salario mensual, que también tiene aún un sistema a destajo para los obreros directos en la producción.
No obstante, la percepción de sus principales directivos es que sus trabajadores “esperaban más”, porque al predominar en ese tipo de empresa los cargos con baja complejidad en la escala salarial, hace que el alza de los precios de productos y servicios básicos que trajo el reordenamiento tenga mayor impacto negativo en su poder adquisitivo.
No es el mismo caso, por ejemplo, de la empresa mixta con capital español Aguas de La Habana, donde con un salario medio de 5 mil 980 pesos, y un estímulo mensual que antes rondaba los 15 pesos convertibles y ahora lo reciben en su equivalente en pesos cubanos, pueden campear mejor en una arrancada del año con pérdidas económicas, sin poder distribuir utilidades al cierre del primer trimestre.
“Por supuesto que los trabajadores querían recibir ese tipo de ingreso adicional, pero también es cierto que tenemos salarios superiores a otros sectores”, apuntó Francisco Jiménez Pedroso, secretario general del buró sindical extraterritorial de la entidad.
Francisco Durán López y Maura Casañas Alfonso, directores Económico y de Capital Humano en dicha entidad, expusieron que la propia naturaleza de sus servicios encareció los costos por el incremento de la electricidad y los salarios, los cuales representan el 48 y el 26 % respectivamente de los gastos totales.
Ello llevó a que al cierre de abril Aguas de La Habana reportó pérdidas por 21 millones de pesos, lo cual no es del todo negativo en las actuales circunstancias, porque la estimación inicial era que para esa fecha ese saldo en rojo fuera más de cinco veces superior.
“Trabajamos en un reajuste del plan anual, y al cierre de mayo es ya posible que podamos obtener una pequeña utilidad”, informó Durán.
Alfredo Heredia Herrera, experimentado enrollador del taller de maquinado de Aguas de La Habana y secretario general de una sección sindical, resumió el sentido de la labor que allí realizan para revertir el resultado económico desfavorable: “Tenemos que trabajar bien, no hay de otra, porque se trata del agua que recibe la población”.
Creo q con las utilidades en la Empresa de tabaco de San Juan y Martinez en vez de beneficios nos a creado pérdidas ya q se a utilizado para el pago de pérdidas acumuladas de años anteriores de la empresa y sus gastos lo cual afecta al obrero q es el q se sacrica trabajando
Laboro como técnico en la UEB MATANZAS de la División Tecnológica de CIMEX, y no hemos podido cobrar las utilidades, pues la División Tecnológica (dirección nacional) tuvo una auditoría deficiente, tengo dudas sobre esto pues nuestra UEB NUNCA ha recibido una calificación de deficiente, entonces cómo es posible que seamos perjudicados por esto?
Considero que la distribución de utilidades utilizando el salario escala como medidor o coeficiente no es justa ya que en mi empresa, Fábrica de Cigarros Lázaro Peña de Holguín, los directos no llegamos con el destajo a acercarnos a muchos de los salarios de los indirectos, aunque realizamos los mayores esfuerzos de estos tiempos de falta de piezas, materiales e insumos, y además somos los que trabajamos en las peores condiciones, nos quejamos con el director y nos respondió que el salario escala es el que define el aporte a los resultados…
Considero que para que ese salario movil sea representativo en el volsillo del trabajador, ademas de que siempre habra que trabajar con eficiencia deben ser actividades que sus producciones o servicios sean muy lucrativas sin limites en los precios que hoy muchas organizaciones tienen tope de hasta su precio multiplicar hasta 3, solo las que vendan por encima de esa tasa y generen ventas millonarias y desmedida cada mes podran ver ese pago por utilidad. En estos tiempos algo muy dificil por la limitacion de materias primas, carencia de energía electrica, carencia de combustible.