Casi a punto de concluir la misión diplomática que lo trajo a Cuba y de regresar a Timor Leste a ocupar otras responsabilidades, Loro Horta recuerda que, tal como nos había confesado en una entrevista anterior, “hasta los 23 años yo no tenía un país”, fue solo en mayo del 2002 que su pueblo pudo lograr la anhelada independencia.
“Fuimos colonia de Portugal por casi 500 años. Luego de la Revolución de los Claveles (1974) se fueron los portugueses, pero entonces nos invadieron los indonesios, acusándonos de comunistas con la argumentación de que seríamos la Cuba de la región”.
“Durante 24 años luchamos por la independencia a un costo de cerca de 150 mil personas muertos. En la actualidad mantenemos buenas relaciones con Indonesia que cuando nos invadió sufría de una dictadura. No obstante nunca olvidamos el pasado”.
Factores que frenaron la Pandemia
Cómo ha afectado la pandemia de la Covid-19 a su país?
“No ha tenido gran impacto pues, entre otras acciones, cerramos las fronteras rápidamente. A pesar de ser un país pequeño contamos con un sistema de salud bastante sólido debido a los mil médicos que estudiaron en Cuba gracias al Comandante en Jefe Fidel Castro, a la Escuela de Medicina donde también están presentes, y a una brigada médica cubana que tenemos allí».
¿En lo económico, cómo les ha afectado?
“Dependemos de la venta del petróleo y el precio ha caído considerablemente. También muchos timorenses que trabajaban en el exterior, como en Gran Bretaña y México, se vieron obligados a regresar lo que afectó sensiblemente nuestra economía. El Gobierno tuvo que dedicar recursos para ayudarlos».
¿Qué perspectivas tienen para el 2021?
“Tenemos la esperanza que con las vacunas salgamos finalmente de esta complicada situación. El próximo año nuestra economía solo crecerá en un dos por ciento.
“En lo político vale destacar que desde el inicio del año contamos con un gobierno estable, lo que no ocurrió así el pasado año. Esto nos permitió enfrentar la pandemia con más eficiencia. No podíamos darnos el lujo de estar peleándonos».
“Pienso que nos recuperaremos económicamente. La pandemia nos obligó a desarrollar más la agricultura, pues el petróleo no se come.
“Creo que empezamos a ver la luz al final del túnel y las vacunas terminarán con esta tormenta. Espero que el mundo haya aprendido la lección y le brinde prioridad a la atención médica, a la salud».
¿Cómo valora la colaboración cubana con su país?
“Cuando Timor Este conquistó su independencia, apenas teníamos unos 30 médicos. Fidel se reunió con nuestros líderes y prometió formar mil. Eso se cumplió. Mientras estudiaban Cuba, mandó una brigada de profesionales de la salud y creó la Escuela de Medicina, algo que para nosotros era un sueño difícil de cumplir.
“También recibimos entrenadores en varios deportes, técnicos agrícolas, ingenieros, educadores para alfabetizar con el método Yo si puedo.
“Estados Unidos nos criticó mucho por la presencia de médicos cubanos, pero ellos van a donde no llegan los médicos timorenses que se formaron en Australia y en Europa”.
“En lo personal no me puedo quejar del tiempo que he permanecido en Cuba . El 99 % de mis amigos son cubanos. Me gusta conocer el país y he estado en muchos lugares. El pasado año lo esperé en la casa de mi chofer, en Marianao.
Agradezco al pueblo cubano por su amistad y cooperación, desde los funcionarios hasta la gente más simple. La diplomacia no son solo los encuentros protocolares. Todos los cubanos me han recibido con los brazos abiertos. He vivido momentos muy importantes aquí y aseguro que regresaré a visitarlos».
[note note_color=»#fdd7c6″ radius=»2″]
Timor Oriental, situada en Asia sudoriental, tiene una superficie de 14.870 Km2, que lo coloca entre los países más pequeños del mundo. Cuenta con una población de 1 millón 267 mil 972 personas. Su capital es Dili, y la moneda corriente es el dólar (USA). Es la economía número 179 por volumen de PIB.
[/note]