Incluir varias instituciones capitalinas en el programa de la XXIII Feria Internacional del Libro, a partir del próximo 13 de febrero, permitirá mayor organización y participación del público, afirmaron organizadores del evento.
Zuleica Romay, presidenta del Instituto Cubano del Libro y del comité organizador de la feria, dijo a Prensa Latina que la diversidad de subsedes y la reducción de actividades posibilitarán un mayor disfrute para participantes e intelectuales.
En esta edición la mayoría de las acciones de la agenda profesional tendrán por sede el recinto expositivo Pabellón Cuba, la Casa del Alba Cultural y los centros de Estudios Martianos y Dulce María Loynaz, informó.
Sobre las propuestas de Ecuador, país invitado de honor de la cita literaria, Romay expresó que se han publicado varias generaciones de autores que vistos de conjunto hacen un recorrido interesante de la historia literaria ecuatoriana, incluyendo autores jóvenes.
Señaló que otro elemento significativo que esta feria pudiera aportar es la selección de obras ecuatorianas del campo de las ciencias sociales, principalmente de la arqueología y la etnología.
Lo que más asombra de esa nación suramericana es que aunque es un país pequeño geográficamente cuenta con una gran diversidad cultural, destacó.
El gobierno ecuatoriano ofrece particular atención a la protección de las especificidades culturales, al fomento y cultivo de las tradiciones y a la observancia desde el punto de vista legal de la diversidad, aseguró.
Lo anterior se manifiesta en la delegación que los representará en esta edición de la feria, compuesta por artistas, escritores y una literatura que refleja esa pluralidad, enfatizó.
(Tomada de Prensa Latina)