Tan real como el bloqueo de Estados Unidos contra Cuba es la solidaridad que hoy el mundo le reafirmó a nuestro país durante la segunda jornada de la Asamblea General de las Naciones Unidas, donde 187 países dieron su voto a favor de la isla caribeña y demostraron que la justicia y la dignidad se elevan por encima del cinismo y la maldad del imperio yanqui.
Tan real como el bloqueo de Estados Unidos contra Cuba es la solidaridad que hoy el mundo le reafirmó a nuestro país durante la segunda jornada de la Asamblea General de las Naciones Unidas, donde 187 países dieron su voto a favor de la isla caribeña y demostraron que la justicia y la dignidad se elevan por encima del cinismo y la maldad del imperio yanqui.
La nueva victoria en la arena internacional renueva el orgullo de millones de cubanos que, nacidos bajo el cerco económico, comercial y financiero de Estados Unidos, no dejan de condenar la hostilidad del vecino del Norte mientras duplican sus esfuerzos laborales para hacer aportes valiosos al país.
Entre los trabajadores y población en general de la provincia de Holguín es evidente la alegría por este nuevo triunfo, sobre el cual la periodista Darianna Mendoza opina que «constituye una muestra de cuán errada resulta ante el mundo la criminal política norteamericana, y ratifica el apoyo de diversos pueblos que, como el nuestro, respetan los derechos humanos y la solidaridad entre las naciones.”
Para la doctora Lizandra Rojas, quien tuvo la posibilidad de prestar colaboración médica en el hermano país de Argelia, la conquista obtenida en esta jornada “demuestra la valentía del pueblo cubano para mostrar al mundo la verdad sobre el gobierno estadounidense, ansioso por reducir el avance de Cuba, que aunque pequeña y sorteando carencias, no deja de arrojar luz sobre los pueblos hermanos y llevar hasta ellos las conquistas de la salud, la educación y el valor del internacionalismo.”
Similar valoración tiene Eudaldo Rodríguez, trabajador civil de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, para quien “el repudio internacional al Bloqueo estadounidense es señal inequívoca de que los principios que defiende Cuba son rectos y justos, por lo cual no se puede flaquear en el empeño de seguir adelante pensando como país y desarrollando nuestra economía a pesar de todas las nuevas zancadillas que nos ha impuesto Donald Trump.
Para el joven ingeniero industrial Alejandro Segura, trabajador del Banco Popular de Ahorro en Holguín, la abrumadora mayoría de votos a favor de nuestro país es otra galleta sin manos al imperialismo norteamericano, que dice querer lo mejor para el país, pero limita la adquisición de recursos vitales para impulsar la producción de bienes y la prestación de servicios.